La cuenca del Guadalquivir, la que abastece a más de dos tercios de la población de Andalucía, ha mantenido sus reservas de agua al situarse en el 18,8% de su capacidad de almacenamiento a lo largo de la última semana, con 1.508 hectómetros cúbicos (hm3), gracias a las últimas y escasas precipitaciones.

Según los datos del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, la cuenca del Guadalquivir se encuentra muy alejada del nivel medio de 4.051 hectómetros cúbicos de reserva de agua de los últimos diez años.

La cuenca mediterránea andaluza también ha mantenido sus reservas en la última semana en el 37% y acumula 432 hm3 frente a los 583 de la media de los últimos diez años.

Igualmente, se mantiene casi invariable la cuenca del Guadalete Barbate con el 22% de su capacidad de reserva en la última semana y cuenta a día de hoy con 366 hectómetros cúbicos frente a 923 de media en los datos de los diez años anteriores.

La cuenca del Tinto, Odiel y Piedras ha aumentado ligeramente el aforo hídrico gracias a las precipitaciones de la semana pasada y sube casi un punto hasta el 65%, siendo la que tiene más reservas de todas las que abastecen a Andalucía, con 149 hm3, aunque es la de menor capacidad.

Por cuencas, la del Guadalquivir (19%), Guadalete-Barbate(22%), Guadiana (23%) y Duero (31%) son las que menos agua acumulan, frente a las cuencas internas del País Vasco (67%) Cantábrico Oriental (63%) y Tinto, Odiel y Piedras (65%) que son las que más agua almacenan.

A pesar de las lluvias caídas los embalses peninsulares acumulan un total de 17.826 hectómetros cúbicos de agua (el 32% de su capacidad), una cantidad muy alejada de la media de los últimos diez años en esta época del año, con 27.786 hectómetros.

El agua embalsada ha aumentado en esta semana en 227 hectómetros cúbicos (el 0,4 por ciento del total actual de los embalses), según informa el Ministerio para la Transición Ecológica, que también apunta que las lluvias han sido abundantes en la vertiente Atlántica y escasas en la Mediterránea. La máxima se ha producido en Vigo, con 136,7 litros por metro cuadrado.