Con lo fácil y lógico que es proclamar lo absurdo de conceder una medalla civil a una advocación religiosa, los de Podemos en Cádiz se han liado de una manera que sólo cabe atribuir a su inexperiencia en el asunto de la condecoración a la Virgen del Rosario. Sí, las contradicciones se pagan, sobre todo si hay tanta gente deseando hacértelo pagar. Naturalmente, si se hubieran pronunciado en contra de la concesión les hubieran caído más palos. Pero eso también es la política. Uno debe saber para qué lo eligieron, y sobre todo para qué se presenta a una elección. Hacer figuras retóricas con palabras elegidas sin mucho tino para justificar una decisión no parece una salida airosa para quienes decían aspirar a liderar un cambio de verdad. Pero la cosa no es para tomársela a choteo. Las decisiones municipales son todas serias, y quizá por esa falta de seriedad el cachondeo se está generalizando.

MÁS ARTÍCULOS DE OPINIÓN Ir a la sección Opinión »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios