Turismo Cuánto cuesta el alquiler vacacional en los municipios costeros de Cádiz para este verano de 2024

Que dice el emperador Trump que eso del cambio climático es cosa de rojos. Así que, tal como está últimamente el patio con eso de las "tradiciones tan arraigadas en el pueblo", para que llueva habrá que volver a rezar a los santos. Las vírgenes tienen más medallas, eso sí, pero los cristos están más organizados: unos están disponibles los martes, otros los viernes y así...

A mí esas tradiciones tan arraigadas en el pueblo me dan yuyu; mira el salto a la verja, símbolo de "Andalucía imparable". Y es que aceptarlas supone darle cuelo a los toros o, ya puestos, a ese machismo con patillas tan ibérico, engañar a Hacienda o a algo tan nuestro como el empleo precario. El fatalismo decora a la tradición: las cosas siempre han sido así y no van a cambiar porque tú lo digas.

Las tradiciones tan arraigadas en el pueblo crían muchísimo polvo, aunque hay veces que se ponen moderniquis, tal vez para disimular. Pero un flashmob de la banda de cornetas y tambores del Perdón, un showroom de mantillas o una session jam de Manolo el del Bombo siguen siendo "tradiciones tan arraigadas en el pueblo".

El mejor antídoto contra ellas es no dejarse. No te dejes, no abdiques de tu condición de ciudadano y no te abandones a la idea de que por mucho que te esfuerces nada va a cambiar.

No dejes pasar ni una, no te dejes engañar por ese monstruo llamado apariencia. Las cosas no suelen ser como te las presentan, no te conformes con un único punto de vista. ¿Sabías que el 87% de las ovejas que se crían en España es con fines electorales?

La fe, amigo, no es tanto creer en lo que no se ve, sino no creer en lo que se ve.

Que no te convenzan de que poder y corrupción vienen en el mismo paquete, ni te creas que todos son iguales, ni que los que más gritan son los más patriotas. El fin es crear un estado de opinión que permita gobiernos corruptos. Tu ignorancia es su fuerza. No te dejes dentro lo que piensas de ellos.

Y sobre todo no creas que España es un país aconfesional como afirma la Constitución, ese clásico del humor.

No, no te dejes, así no te crecerá el moho que producen esas tradiciones tan arraigadas en el pueblo.

MÁS ARTÍCULOS DE OPINIÓN Ir a la sección Opinión »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios