Los hermanos de la Pastora -actualmente volcados con la organización de sus cultos anuales- consideran que, aunque el vía crucis organizado por la diócesis en Cádiz es un día antes de la procesión que tradicionalmente organiza la hermandad cada 15 de agosto, "no hay de qué preocuparse".

Rafael Verdugo -hermano mayor de la cofradía pastoreña- es el primero en reconocer que "puede restar algo de público, lo cual es lógico al tratarse de un acontecimiento histórico como el que va a celebrarse el día 14", pero al mismo tiempo asegura que "la Pastora es de sus fieles, quienes, como cada año, la acompañarán en su recorrido por las calles del barrio". Es el pensamiento común de todos los pastoreños, que ayer vivieron la tradicional mudá del paso al templo para entronizar a su titular -este año ataviada con la saya de la coronación y el manto verde de las granadas- de cara a los cultos que tendrán lugar en la Iglesia de la Pastora a partir de mañana.

En efecto, el triduo se celebrará los días 12, 13 y 14 de agosto. Las jornadas comenzarán con el rezo del santo rosario y del ejercicio a las siete y media para dar paso luego a la eucaristía, presidida por el padre fray Raúl Sánchez Flores. Durante el primer día, además, se bendecirán e impondrán medallas a los hermanos y fieles que lo deseen, los nuevos hermanos jurarán las reglas y se hará entrega de obsequios a aquéllos que cumplan sus bodas de plata dentro de la hermandad. Asimismo se entregará -el segundo día del triduo- un obsequio a la asociación de vecinos del barrio en conmemoración de su 25 aniversario.

El tercer día a las diez y media habrá un rosario de antorchas que enlazará con la primera felicitación a la Santísima Virgen en el día de su festividad, acto al que seguirán la eucaristía y el rezo del Ángelus. Tras la función principal se hará entrega a Cáritas de un cheque de mil euros fruto de la venta de pulseras solidarias que la hermandad desarrolló la pasada feria -y continuará realizando- a través de su bolsa de caridad Beato Diego. Cabe señalar que durante el lapso de tiempo que hay entre los cultos y el rosario de antorchas tendrá lugar en la plaza de la Pastora el clásico concierto, que este año corre a cargo de la banda de cornetas y tambores del Santísimo Cristo del Perdón.

Ya en la tarde, a partir de las siete y media, dará comienzo la anual procesión de gloria y alabanzas cuyo itinerario evitará este año Rosario y el segundo tramo de Murillo debido a las obras de la calle San Gaspar. Para la ocasión se estrenará una naveta realizada en plata de ley por los talleres Delgado López. La misma hace alusión a los orígenes carraqueños de esta hermandad, ya que representa un navío construido por los trabajadores del arsenal a fines del siglo XVIII y bautizado como Divina Pastora en homenaje a esta cofradía fundada por ellos mismos años antes. Asimismo se estrenarán 15 varitas pequeñas para el grupo infantil realizadas por el orfebre isleño Miguel Cuadros cuyo escudo está formado por una M de María con un cayado pastoreño cruzado en diagonal. También cabe destacar la restauración de todos los incensarios y de la naveta antigua.

La nota musical correrá a cargo de la Banda Municipal de Chiclana Maestro Enrique Montero tal y como ha venido haciendo los últimos años.

La hermandad ha invitado a realizar la primera llamá a la familia del difunto hermano Joaquín Rodríguez Royo, en agradecimiento por todos los años que dedicó a las cofradías como presidente del consejo. También estará presente la hermandad de Humildad y Paciencia para realizar la estación menor en el convento de las Capuchinas con motivo de su 25 aniversario fundacional, así como ancianos procedentes de varias residencias de la ciudad, que ocuparán un lugar privilegiado en la calle Cardenal Spínola para contemplar el paso de la Divina Pastora que este año irá engalanado con rosas blancas.