El Ayuntamiento de San Fernando estima que las irregularidades económicas de la Caja municipal ascienden a 7.674.463,36 euros en un periodo comprendido entre el 31 de diciembre de 2002 y el 31 de marzo de 2009. Es por tanto el ejercicio económico de 2003 el primero en el que estos descuadres comienzan a vislumbrarse, según se deriva del informe que en la jornada del lunes presentó Intervención ante el alcalde isleño, Manuel de Bernardo, quien seguidamente decidió ponerlo en conocimiento de los portavoces de gobierno, así como del juzgado que está instruyendo el procedimiento en su fase de diligencias previas.

También decidía someterlo ayer a la luz pública, del mismo modo que hiciera el pasado 1 de abril, cuando el escándalo llegó a los medios de comunicación mediante un escueto comunicado. Fue ese mismo día cuando el interventor, la tesorera y los servicios legales municipales denunciaron en la Comisaría Nacional de la Policía la desaparición de 468.623 euros de esta caja, acusando para ello a los dos funcionarios directamente responsables de la misma de un presunto delito de malversación de fondos públicos. Ambos fueron entonces detenidos y pasaron a disposición judicial el sábado 4 para salir en libertad con cargos, pero sin fianza.

Así, el Ayuntamiento señaló entonces como únicos responsables a estos dos funcionarios, con más de dos décadas de experiencia en sus cargos. Y también lo hizo ayer el edil andalucista cuando fue cuestionado al respecto. “No tenemos constancia de que nadie más esté implicado en los hechos, pero hay  que ser cautelosos y dejar actuar a la Justicia”, puntualizó.

Porque De Bernardo, quien vivió ayer una de sus comparecencias más incómodas, quiso dejar claro su compromiso de “máxima transparencia” con los ciudadanos, eso sí, dentro de los cauces de la legalidad. Su objetivo, aseguró, es llegar al fondo de la cuestión, razón por la que también el Gobierno local acordó la comunicación al Tribunal de Cuentas del resultado de esta investigación interna, de la que ayer se ofrecía esta primera estimación. Porque por el momento la denuncia municipal ante los juzgados sigue recogiendo como cifra el medio millón de euros inicial y las nuevas cantidades se irán sumando a ésta según se vayan detallando las cuentas de cada año hasta llegar a 2003, donde hasta ahora el interventor detiene la investigación. Se abre aquí la primera de  una serie de interrogantes. ¿Por qué es justo en esa fecha y no en otra cuando supuestamente comienza el desfalco en la Caja?. La investigación municipal, por el momento, no contempla analizar los datos de ejercicios anteriores a 2002 –en el que las cuentas, según este primer informe, sí cuadran–, aunque el alcalde tampoco quiso ser tajante a este respecto. ¿Existen entonces garantías de que estas irregularidades se remonten más allá de lo hasta ahora estudiado?

Aún así, la ampliación en el tiempo anunciada ayer por el alcalde incrementa también las posibles responsabilidades –si las hay– de cargos administrativos y políticos. Por esta razón, el nombre del que fuera alcalde de la ciudad hasta enero de 2005, Antonio Moreno,  no pudo dejar de salir en las cuestiones que los periodistas le plantearon al actual regidor. Porque estas irregularidades en las cuentas podrían empañar al menos dos años de su etapa.

Aunque a ésos dos habría que sumar cuatro años más y otros tres meses que contienen este informe en el que la monumental cantidad recogida no deja indiferente a nadie. Repercusiones económicas ya ha habido, precisamente en la acumulación de retrasos en pagos a proveedores. El alcalde informó a este respecto que el Ayuntamiento ya ha iniciado los trámites legales para la aprobación de una operación en Tesorería para hacer frente a aquellas facturas demoradas fruto de estas irregularidades.