Macarena, la hija de Rafael Ricardi Robles, el portuense encarcelado desde 1995 por unas violaciones que la Policía Nacional achaca desde hace una semana a dos jerezanos, está más tranquila desde el mediodía de ayer. Aunque aún sigue sin tener noticias de su padre, encarcelado en la cárcel de Topas, en Salamanca, con el que no le dejan hablar (el protocolo penitenciario determina que debe ser el preso el que contacte por teléfono con quien desee), al menos ya empieza a contar con respaldos.

Macarena y su tía Milagros, la hermana menor de Ricardi, se entrevistaron al mediodía de ayer con una abogada de la Asociación Pro Derechos Humanos de Andalucía, Antonia Alba, quien, según informó a este diario la joven, de 22 años, "nos ha ofrecido su ayuda". La letrada, dijo la hija de Ricardi, "se ha ofrecido a entrevistarse con la fiscal para ver de qué modo se puede agilizar la liberación de mi padre".

La abogada de Derechos Humanos, Antonio Alba, confirmó ayer tarde a este periódico que efectivamente se había reunido con la hija y la hermana del portuense condenado por la violación de una joven en agosto del año 95 en El Puerto, al que la Policía cree inocente. La letrada anunció su intención de entrevistarse ahora con el abogado de oficio que llevó la defensa de Ricardi durante el juicio por el que fue condenado, en octubre de 1996, el gaditano Miguel Fernández-Melero, para conocer con más profundidad el asunto.

También Antonia Alba tiene previsto interesarse por el caso ante la Fiscalía, lamentando que desde el Ministerio público "no se les ha dado ninguna contestación a los familiares. Tan sólo que se está investigando para ver si procede la revisión de pena, pero sin ni tan siquiera fijar un plazo".

Para la abogada, caso de que se demuestre la teoría policial que exculpa por completo al portuense, "nos hallaríamos ante un nuevo caso de error judicial. Y no es el único. Porque desde el caso de Mari Luz , es rara la semana en la que no nos topamos con asuntos de este tipo". Así las cosas, desde Derechos Humanos han aprovechado para volver a requerir a los responsables judiciales que atiendan con mayor prontitud las cuestiones que afectan a los presos, incidiendo en la grave problemática existente en el Juzgado de Barbate, "con bastantes delincuentes primarios en la cárcel preventiva cuando se les podría suspender la pena".

El presidente de la Asociación Pro Derechos Humanos en Andalucía, Rafael Lara, por su parte, confirmó también a este diario la intención del colectivo de ayudar a la familia de Ricardi tras conocer por los medios la increíble historia. "Es un error de la justicia espantoso", agregó Lara, quien apostilló que, en caso de que se demuestre su inocencia, "hay que sacarlo de la cárcel lo antes posible".