LA alcaldesa ha mandado hacer un "manifiesto por el puente", por ese puente que antes era cosa suya exclusivamente, y que ahora es de los malos del PSOE que una vez más castigan a la ciudad. Un manifiesto que se convertirá en un plebiscito a favor de Martínez, y en una manifestación de repulsa a los socialistas, y que, de paso, servirá para que los gaditanos no se preocupen por otras noticias que en estos últimos días han aparecido, y que no son del agrado de la alcaldesa.

Así, por ejemplo, los votantes se olvidarán de que la propaganda municipal pregonó que la economía del ayuntamiento gaditano no sólo estaba saneada, estaba boyante, floreciente, tanto, que se podían invertir más de 40 millones de euros en una tribuna para el campo de fútbol, de lo que cabría deducir que hay dinero para atender otras necesidades de inversión en la ciudad, y que los proveedores del ayuntamiento cobran religiosamente. Pero la realidad es que las cosas no están tan bien como la propaganda decía. La realidad es que pequeñas empresas, como Animarte, malviven porque el ayuntamiento no les paga. O que una gran empresa, como Imesapi, se plantea dejar el servicio de playas -limpieza y mantenimiento- por el impago municipal de la deuda contraída con la empresa del Grupo ACS. Lo llamativo de esta noticia es que, tras reconocer la deuda, fuentes municipales declararon que se trabajaba, no para pagarla, sino para que "esto no afecte a la limpieza de las playas", y la solución ya la han anunciado: recurrir a que Aguas de Cádiz, la empresa municipal más rentable gracias a las tasas de basura que pagamos los gaditanos, se haga cargo de la limpieza, contrayendo un nuevo gasto que sumar a la deuda a Imesapi.

O se olvidarán de que las obras de asfaltado de un trozo del viario de la Alameda, una obra que parecía casi interminable, que se nos vendió como una excelente obra, única, genialidad municipal, terminada en octubre de 2009, ha habido que repararla nueve meses después. O que a Onda Cádiz, la televisión municipal que pagamos todos, incluso los que no votan al PP, se le abre expediente sancionador por dedicar en tres meses 22 noticias del caso MATSA, el supuesto trato de favor de Manuel Chaves a una empresa en la que trabaja su hija, destacando en sus noticias la querella que el PP presentó contra Chaves, y no recogió, ni a hurtadillas, que el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía no admitió la querella. O que el ayuntamiento de Cádiz es de los peor puntuados en índice de transparencia por Transparency Internacional España, destacando la opacidad municipal en materia urbanística o en la información sobre la corporación, y que, tras la evaluación realizada sobre la página web municipal, ocupa el puesto 93, de 101 ayuntamientos estudiados.

Pero no pasa nada. Ahora hay que centrarse en el manifiesto-plebiscito que Martínez ha mandado hacer, porque la alcaldesa manda, aunque a veces se le olvide gobernar para todos.