Dentro del amplísimo abanico de jugadores que interesan y que mantejan los responsables de la parcela deportiva del Cádiz, el argentino Tiago Casasola podría encontrarse en un lugar preferente. Aunque desde el club ni se confirma ni se desmiente esta posible incorporación, sin duda por el lógico hermetismo que mantiene en todas las negociaciones que tiene abiertas, lo cierto es que se trata de un jugador que podría venir muy bien a la plantilla que dirige Álvaro Cervera.

Pese a su corta edad (Buenos Aires, 11-8-1995), el defensa central, de 1,90 de estatura e internacional sub'20 en seis ocasiones, incluyendo el Sudamericano y la Copa del Mundo de la categoría, es una de las más firmes promesas del fútbol argentino e incluso dio el salto a Europa hace ya un par de campañas.

Formado en las escalas inferiores del Huracán, en 2012 firmó por el Boca Juniors, aunque nunca llegó a formar parte de la primera plantilla y en 2014 fue traspasado al Fulham londinense. En Inglaterra tampoco tuvo la oportunidad de jugar con el primer equipo y a comienzos de 2015 se comprometió con la Roma, que lo cedió al Como. El 19 de septiembre debutó en la Serie B italiana, competición en la que ha participado hasta la fecha.

De concretarse en los próximos días el fichaje, el Cádiz cerraría la contratación para uno de los puestos que efectivamente necesita reforzar, dado que los únicos centrales de la plantilla son Aridane y Migue, al margen de Servando, reconvertido como lateral, y el canterano Sergio.