La experiencia de situar a Kike López como lateral derecho ante el Cacereño no dejó satisfecho a Antonio Calderón, que da vueltas a las posibilidades existentes para cubrir una demarcación huérfana por la baja de Óscar Rubio y la ausencia de George, que lleva dos meses en Ghana para tratar de solucionar un problema con su visado. Sin lateral derecho, el técnico analiza todas las opciones, que han ido en aumento más allá del propio Kike López y de Mantecón.

Unas siete semanas le quedan al preparador gaditano con un problema mayúsculo en la plantilla por culpa de una mala planificación a la hora de confeccionarla, pues desde el mercado veraniego se apuntaba al riesgo que suponía quedarse sólo con un hombre para esa demarcación. Al final ha sucedido lo peor y a Calderón le queda inventarse una solución para encontrar la pieza adecuada.

Kike López fue el elegido el pasado domingo y el propio entrenador reconoció que le vio nervioso. Cierto es que el salmantino cometió dos errores de bulto que a punto estuvieron de costar un gol. Tampoco anduvo preciso en los controles y apenas se prodigó en ataque. Cuando Calderón le sustituyó, la apuesta de Mantecón dio mejor resultado porque, principalmente, el veterano futbolista fue a la práctico, a no complicarse. Mantecón es una de las opciones que baraja el cuerpo técnico para ese lateral derecho, posición que ocupó con acierto en La Línea durante la última ronda celebrada de la Copa del Rey. El centrocampista está siendo más noticia reconvertido a la zaga que en su posición natural.

Otra posibilidad señala a Andrés Sánchez. El murciano, suplente de Tomás en la banda contraria, podría ser la sorpresa del técnico metiéndole por la derecha. Su última aparición fue en Melilla, donde jugó en su puesto habitual -por detrás de Tomás, que se ubicó por delante- y anotó un gol salvador para el equipo y el futuro del entrenador. Da la impresión que puede ser la alternativa adecuada y favorita, pues reúne las condiciones de un zaguero -fuerza y talla, sobre todo- con el único pero de que estaría obligado a jugar a pierna cambiada. Un dato a tener en cuenta es que en la sesión preparatoria de ayer, el técnico ya le estuvo probando en la derecha.

Andrés está viviendo por el momento una campaña difícil al no ser titular, superado por un compañero, Tomás, que acaba de cumplir 21 años. El murciano no es la primera opción para el lateral zurdo y eso le está llevando en exceso al banquillo e incluso a la grada. La puerta que se le puede abrir como lateral derecho sería una oportunidad para estar en el once y volver a coger la confianza perdida. Andrés es un lateral con llegada al área rival que todas las campañas hace goles.

Un nombre que ayer se unió a la lista salió por boca del propio protagonista. Fue Servando el que en rueda de prensa dejó abierta la puerta a la posibilidad de pasar del puesto de central al de lateral derecho. Sus palabras sorprendieron pero el zaguero isleño las pronunció plenamente convencido. "Estoy dispuesto a jugar de lateral si es necesario. No he jugado mucho en esa posición, pero el entrenador tendrá que elegir. Quiero verme en el once", apuntó como gesto de buena voluntad pero poco probable por lo que supondría para Calderón variar también de un partido a otro el centro de la defensa.

Cabe recordar que todo el problema del lateral derecho viene como consecuencia de la lesión de Óscar Rubio, quien en La Línea sufrió un desgarro muscular.

Al margen del problema de improvisar con un lateral derecho de garantías, una buena noticia para el cuerpo técnico es la vuelta de Jon Ander Garrido, que ante el Cacereño cumplió un partido de sanción como consecuencia de la acumulación de amonestaciones. El pivote vasco tendrá que pelear por ganarse un sitio en un centro del campo donde otros tres compañeros (Juanma Espinosa, Navarrete y Mantecón) tienen también la posibilidad de actuar.