La adolescencia es una etapa de cambio, de crecimiento, de construcción de la identidad. Una etapa en la que resulta imposible pensar sin tener en cuenta el conflicto del adolescente consigo mismo, con su medio inmediato -grupo familiar, compañeros de aulas y amistades- y con el medio sociocultural. Los conflictos se convierten en esta etapa de la vida en un elemento estructurante porque ocupan una posición central en el crecimiento de los jóvenes, pero un dato revelador es que confían en el diálogo y en la mediación para afrontarlos y resolverlos.

Así lo revela el estudio Conflictos en la adolescencia. Los protagonistas toman la palabra. Un estudio que nació con el objeto de conocer las percepciones de los adolescentes españoles acerca de los conflictos a los que se encuentran expuestos en las aulas y en las familias, y que ha sido realizado por la ong independiente y laica Liga Española de la Educación y la Cultura Popular.

Esta investigación fue presentada ayer en Cádiz, en el IES Columela. Al acto asistió la delegada provincial de Educación, Blanca Alcántara; la vicepresidenta segunda de la Liga Española de Educación, Carmen Pinedo; la presidenta de la Liga Gaditana, Ana Rodríguez; y la socióloga y autora de la investigación, María Antonieta Delpino, que fue quien explicó el proyecto.

En este estudio se le ha dado voz a un alumnado de entre 15 y 18 años de 24 centros públicos y concertados de España, y para su realización se ha partido de entrevistas grupales exploratorias con adolescentes, así como de la aplicación de 1.416 cuestionarios autocumplimentados por estudiantes matriculados en ESO, Bachillerato y Ciclos Formativos en centros educativos de Bilbao, Cáceres, Cádiz, Madrid, Málaga, Murcia y Santander. Asimismo, se desarrollaron seis grupos de discusión, con la participación de 48 adolescentes de ambos sexos; y entrevistas informales abiertas a profesores y equipos directivos de institutos. En concreto, de Cádiz han participado alumnado y profesorado de los centros Rafael Alberti, Columela y Salesianos.

De este trabajo de campo se han obtenido interesantes resultados, y uno de los más significativos es que el 79,6% del total de las chicas encuestadas y el 70,4% de los chicos consideran que la mejor manera de afrontar los conflictos en el aula es mediante el diálogo, explicándole a la otra persona que lo que ha hecho no está bien. Y como segunda opción, la solución que aportan es la mediación, esto es, ayudar a hacer las paces (69,5% de las chicas y 67% de los chicos). Solo el 2,4% de las estudiantes y el 9,5% de sus compañeros varones defienden la violencia física como medio para resolver problemas. La vicepresidenta primera de la ong y directora del proyecto, María Jesús Eresta, no pudo asistir ayer a la presentación del estudio, pero a través del hilo telefónico quiso resaltar estos porcentajes: "Me parece precioso que la gran mayoría de los adolescentes esté concienciado de que el diálogo y la mediación son las dos mejores herramientas para enfrentarse a los problemas. Casi siempre los titulares sobre adolescentes suelen ser negativos, y éste no lo es".

La investigación recoge también los problemas más relevantes en las relaciones entre iguales en las aulas y, a juicio de los encuestados, el principal problema lo constituyen las burlas, debido al impacto socio-emocional que tienen en la formación de la identidad. Otro conflicto lo origina la alteración del orden en clase. Y otros problemas surgen por la falta de respeto y por la falta de tolerancia.

Delpino también habló sobre los conflictos que surgen en las familias, pero si algo destacó fue que los adolescentes valoran mucho la vida familiar. "Lo que más les importa a los adolescentes es tener buenas relaciones familiares. En Cádiz, en concreto, así lo defiende el 67% de las chicas encuestadas y el 40,3% de los chicos. Y en términos generales, de acuerdo a los resultados del estudio, al 75% de los adolescentes entrevistados les gusta estar con su familia, con algunas diferencias según el género: 79,2% de las chicas frente al 71,2% de los chicos.

Por último, destacar que los participantes en el estudio (28,9% de las chicas y 34,6% de los chicos) identifican el conflicto entre los padres (peleas, discusiones, enfrentamientos) como el problema más importante. Y en segundo lugar (28,6% de las entrevistadas y 27,4% de los entrevistados) aparece el clima de violencia en el hogar.