El Ministerio de Defensa ha puesto en marcha un plan de racionalización de instalaciones militares con el que espera ahorrar hasta 15 millones de euros anuales en gasto corriente y que en Cádiz supondrá el cierre de las actuales dependencias de la Delegación de Defensa y su traslado al Instituto Hidrográfico (que en un futuro próximo podría perder parte de su actividad y de la enorme extensión con que cuentan estas instalaciones, según algunas fuentes consultadas).

Además, sorprende que el plan -Propuesta de Racionalización y Utilización Eficiente del Patrimonio Inmobiliario del Ministerio de Defensa (PREPIDEF)- contemple también el cierre parcial de la Residencia Cortadura, pues es una de las pocas de Defensa que tienen un uso turístico que supera a la temporada de verano. Su privilegiada situación, rompiendo en dos el paseo marítimo, ha sido siempre objeto de polémica. Y, por último, habla también de la incorporación de la parroquia del Santo Ángel Custodio de la plaza del Falla (la primera parroquia castrense en la historia de España) a un convenio cívico-militar para la gestión y mantenimiento aún por conocer.

Todo ello -junto al traslado de la Factoría de Subsistencias y Almacén de Víveres en San Fernando a la Carraca- supondrá al Ministerio un ahorro anual que se ha estimado de 131.338 euros. La inversión y los gastos de la operación sumarán 957.787 euros y el suelo urbano liberado alcanza los 8.324 metros cuadrados.

Fuentes del Ministerio de Defensa aseguraron ayer que la aplicación de estas medidas es inmediata y que obedece a la necesidad de reagrupar instalaciones militares que hasta ahora estaban infrautilizadas en pos de una mayor eficiencia y un mayor ahorro económico. En total, en toda España, la primera fase del plan contempla 49 actuaciones que afectarán a 109 inmuebles. Muchos de ellos cerrarán y otros se trasladarán o serán reagrupados en instalaciones mayores. Todo ello entre 2014 y 2017, para lo cual se prevé que a finales de este año se cuente con una planificación detallada de cómo desarrollar esta primera fase.

El plan de racionalización afectará también a San Fernando, donde está previsto el cierre de una de sus cuatro residencias militares (aún no se ha concretado cuál de ellas).

También plantea el traslado de la Factoría de Subsistencias y Almacén de Víveres de la Armada -dependencias localizadas en las proximidades de Puente de Hierro, justo al lado del Parque de la Historia y el Mar- al interior del Arsenal de La Carraca, lo que dejará sin uso militar estas instalaciones.

La actuación más relevante de todas las que plantea esta propuesta de Defensa es ya sobradamente conocida, el cierre militar del hospital de San Carlos, que el Ministerio hará efectivo a finales de este año.

Actualmente, el Gobierno central negocia con la Junta de Andalucía la transferencia de la titularidad de este centro sanitario, que lleva años completamente infrautilizado (ahora en verano, por ejemplo, tan solo mantiene en activo una de las diez plantas del hospital). Inicialmente, también está previsto que el personal civil adscrito a estas instalaciones -unas 350 personas- pasen también a la sanidad pública andaluza, aunque todavía no se ha concretado en qué condiciones lo harán.

Con la cesión de San Carlos, que Defensa suma al cierre del hospital naval de Cartagena y al traslado de la farmacia militar de Ceuta, el Gobierno central espera ahorrar 3,2 millones de euros anuales. En conjunto, esta operación, según la información publicada por Defensa, supondrá un gasto de 592.090 euros y el suelo liberado ocupa una superficie de 224.111 metros cuadrados.