La Asociación por la Recuperación de la Memoria Democrática, Social y Política de San Fernando (AMEDE) rendirá hoy un nuevo homenaje a los represaliados por el franquismo en un acto que se desarrollará a partir de las 11.00 horas en el cementerio municipal coincidiendo con el aniversario de la "saca" que acabó con el asesinato del alcalde Cayetano Roldán Moreno y de otras cuatro personas.  

En esta ocasión, recuerda el colectivo, el acto coincide con el desarrollo de los trabajos de intervención arqueológica y antropológica que desde el pasado mes de agosto vienen desarrollándose en el camposanto por personal técnico y voluntario de esta asociación.

Durante el desarrollo del acto se procederá a la lectura de un manifiesto por parte de los familiares de represaliados en el que se pretende dar a conocer la importancia de los valores que defendieron estas personas cruelmente asesinadas. "Personas valientes cuyo único crimen fue atreverse a desafiar los privilegios de una minoría, expresando sus ideas políticas, soñando con la posibilidad de una sociedad más justa e igualitaria", afirma Amede. "Es el caso del conocido alcalde don Cayetano, cuyo nieto, Juan Manuel Fernández Roldán, dedicó gran parte de su vida a luchar por defender su memoria, sus bondades como persona y sus cualidades como médico y alcalde".

Precisamente, Juan Manuel, uno de los precursores de la creación de esta asociación y su primer presidente, falleció recientemente sin llegar a ver el inicio de los trabajos de exhumación de los cuerpos entre los que presumiblemente está el de su abuelo. "Estas actuaciones llegan tarde, demasiado tarde en ocasiones, transcurridos más de cuarenta años desde la muerte del dictador y ocho décadas después de perpetrados los crímenes, cuando la población que vivió y presenció los hechos de los que ahora los arqueólogos, antropólogos e historiadores dan cuenta está extinta o a punto de estarlo", lamenta Amede. 

El acto, recuerda la asociación, tiene como finalidad "dar visibilidad ante la sociedad de la injusticia cometida con estas personas a las que las deficientes políticas de memoria de nuestro país han tardado en dar respuesta; situación denunciada desde hace bastantes años por las asociaciones memorialistas y organizaciones internacionales y de derechos humanos", precisa. La recuperación de la memoria silenciada y la dignificación de los restos óseos, constatando las evidencias de muertes violentas, son también algunos de los objetivos que persigue la asociación isleña desde su creación.

"Al igual que don Cayetano, fueron muchas las personas que como él cayeron bajo el fuego de la ignorancia, la intolerancia y la brutalidad. Es necesario, como forma de dar a conocer la ignominia sufrida por nuestros conciudadanos, que actos como este recuerden y transmitan a las generaciones futuras la necesidad de diálogo y respeto en la defensa de las ideas políticas, cualquiera que sea su contenido, en el deseo de construir una sociedad más madura y preparada ante los desafíos que están por llegar", sostiene el colectivo.