Cultura

Bestiario de almas en pena a escena

  • La compañía Albanta estrena 'Bendita gloria', una nueva obra del dramaturgo portuense Juan García Larrondo

  • Las representaciones tienen lugar hoy y mañana en La Lechera

Los actores de la compañía Albanta, en uno de los ensayos finales de 'Bendita Gloria'.

Los actores de la compañía Albanta, en uno de los ensayos finales de 'Bendita Gloria'.

Como fantasmas, como almas en pena, que cobran vida durante unos minutos para contarnos su historia -que, como todas las historias, gira sobre el amor y la muerte- el cuarteto protagonista de Bendita Gloria abre y cierra su función en una foto fija. Una imagen que profetiza el desenlace del nuevo texto del dramaturgo portuense Juan García Larrondo realizado para la compañía Albanta, con la que ya trabajó hace más de 20 años en Celeste Flora, y que hoy tiene su estreno sobre las tablas de la Sala Central Lechera donde también se exhibirá mañana.

"Un catálogo de almas en pena, casi una apología del amor primario, del amor egoísta, de los amores tóxicos, donde, al final, también se habla de las apariencias, de querer ser lo que no se es, de querer sentir lo que no se siente, y cómo esta situación nos conduce a lo que más espanta nos espanta, la soledad". Con estas palabras, Larrondo desmenuza el espíritu de su tragicomedia con tintes de thriller que tiene como piedra a angular a Gloria, una mujer que, tras la muerte de su padre, se recluye en la vieja casa familiar donde decide aislarse para penar por sus remordimientos y en la que tendrá que enfrentarse contra los fantasmas de su alma atormentada y con una galería de personajes tan perdidos y egoístas como ella misma.

Gloria, la protagonista, se encierra en la vieja casa familiar tras la muerte de su padreEl texto original de 'Bendita Gloria' saldrá publicado por la editorial Yorick

¿Egoístas o supervivientes? ¿Náufragos o aspirantes a capitantes? ¿Buenos o malos?... "Lo que quieren es salvarse, agarrarse aunque sea a un clavo ardiendo, que es la imagen que yo tenía en la cabeza y que dio origen al texto, el clavo ardiendo", explica el autor que no hace "un juicio moral" a los personajes interpretados "magníficamente" por Charo Sabio, Susana Rosado, Carmen Reiné y Jay García ya que sólo nos presenta "algo que hemos hecho todos en algún momento, aferrarnos a otras personas en un momento de desesperación".

Quizás por ello en Bendita Gloria nada es lo que parece. Ni siquiera la casa familiar en la playa en la que se enclaustra Gloria y que desea vender su hermana Victoria. "La casa es la metáfora de una isla y de la condición humana. Una casa que parece que se muere, pero que reacciona y está viva. Una casa comandada por una mujer que exige un orden, una disciplina y donde no hay espacio para muchos capitanes... Sí, son todos náufragos, gente que va de paso y que intenta nutrirse de ella. El clavo ardiendo que te decía...", reflexiona el escritor que también analiza a Gloria, su protagonista, como una mujer "con mucho amor que dar pero que, por las circunstancias que la rodean y que se desarrollan en la obra, también se puede llegar a convertir en un monstruo".

Amor, egoísmo y ausencia que convierten a los personajes en "seres deformes, retorcidos y crueles". "Fantasmas, sí, son fantasmas porque son incapaces de vivir y son incapaces de vivir porque no son amados como esperan, porque se olvidaron de amar", acierta el autor teatral "muy satisfecho" con el trabajo tanto de los actores como con la dirección de Pepe Bablé. "Ha conseguido que huela a naftalina, que es a lo que tiene que oler esa casa, mantener la intriga sin olvidar los matices y ese sello de Albanta que me encanta y que es tan complicado, el de no dejar de interactuar en ningún momento, el de que los personajes estén en escena siempre y conseguir que el público siga todas las historias", alaba el creador que con Bendita Gloria salda "esa justa poética pendiente de volver a trabajar juntos que es algo que me ha hecho mucha ilusión".

Porque para Larrondo trabajar con Albanta es algo "muy natural" tanto por la relación "de cariño" que los une y por la seguridad que le inspira un grupo con más de treinta años de trayectoria que "inmediatamente hace los textos suyos". " Les di el manuscrito y ellos tenían total libertad para manipularlo y adaptarlo a su pulsión y a su estilo y, como siempre, ha habido un respeto muy grande por la obra y han realizado un magnífico proceso de dramaturgia", asegura el autor que está "muy orgulloso" tanto de su propio trabajo como del de la compañía, "un trabajo superlativo a nivel actoral y de dirección". "No sé si gustará más o menos pero no se puede dudar del trabajo y de la intención que no es otra que el público se levante sin olvidar lo que ha visto, pues de otra manera no habría teatro. La obra es intensa, sí, y mueve, y es tragicómica porque la vida es así, una situación intensamente dramática puede explotar en risas". Universo Larrondo puro y duro.

Un universo que se podrá disfrutar, como otras obras del dramaturgo portuense, en las tablas pero también en papel a través de la editorial especializada en artes escénicas Yorick. "Como género literario, el teatro es el hermano pobre", se lamenta el escritor que sin embargo adora esa dimensión literaria de la dramaturgia. "El teatro es el único género literario que escribe palabras para ser dichas en silencio y caligrafías para ser vociferadas con el alma", sentencia el autor que también verá sus Comedias Selektras como protagonistas de una lectura dramatizada el próximo día 28 en la Semana del Libro de la Universidad de Cádiz. Además, el próximo mes de junio su comedia Mariquita aparece ahogada en una cesta se estrenará en Madrid, en Teatros Luchana.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios