El Cádiz B visitaba el Miguel Román con la intención de seguir sumando puntos y alejarse un poco más de la zona delicada. El equipo gaditano realizó una buena primera mitad, creando ocasiones de peligro y dominando el tempo del encuentro. Sin embargo, en la segunda mitad un error defensivo rompió el partido y tiró por tierra todo el trabajo realizado hasta el momento.

Los gaditanos saltaron al terreno de juego con las ideas muy claras y buscando el control del balón. Su fútbol era fluido y fruto de ello empezaron a llegar las ocasiones. En los primeros compases, una falta cerca del área nazarena se convirtió en la primera ocasión del partido. Juanito fue el encargado de lanzarla y obligó al meta Diego a despejar el balón con los puños para evitar el gol.

El partido transcurría bajo dominio amarillo y los jugadores locales decidieron realizar una fuerte presión a partir de medio campo y juntar sus líneas para evitar que los gaditanos pudieran encontrar algún pasillo para colarse en su área. Sin embargo, el filial amarillo movía el balón con velocidad y salía bien del acoso al que los sometían los jugadores del Dos Hermanas. Corría el minuto 25, cuando Ezequiel remató con mucha intención y Diego, muy atento, evitó que el balón se colara en la portería. Tres minutos después llegó la jugada polémica del partido, cuando en una contra, los nazarenos pidieron penalti por manos de Fornell. Esta jugada despertó a los locales que, empezaron a igualar la contienda. A falta de cinco minutos para el descanso llegó la ocasión más clara para el cuadro local. Currito, absolutamente solo en el punto de penalti, conectó un buen testarazo, pero Tomás logró abortar el peligro.

En la reanudación las cosas continuaban muy igualadas. Entonces llegó la jugada que rompió el partido. Corría el minuto 70 de partido cuando la defensa amarilla cometió un error de marcaje y Currito pudo controlar a placer un pase largo desde la derecha. Carli y Fornell fueron a por él y el jugador local se deshizo muy bien de ellos con un quiebro para después, con un tiro cruzado, batir a Tomás. A partir de este momento, el Dos Hermanas ganó confianza y pudo hacerse con el control del balón. Por su parte, los gaditanos no reaccionaron ante el gol y sólo en el minuto 63, un cabezazo de Julio inquietó la portería de Diego. En el tramo final del encuentro llegó la sentencia del duelo con la mejor jugada del partido. Era el minuto 78, cuando Currito realizó una perfecta vaselina desde la izquierda y el balón se coló en la portería del Cádiz B, ante la impotencia de la zaga amarilla, que no pudo hacer nada para evitar el 2-0, que a la postre sería definitivo.