¿De dónde sale tanta gente, Dios mío de mi arma? Menos que el domingo, esa es la verdad. Y más concentrada en lugares concretos esperando a las agrupaciones oficiales que anuncian sus recorridos en las redes sociales y donde suelen actuar las callejeras. Así se dan auténticos colapsos de público como en el Oratorio de San Felipe Neri, donde volvió a cantar la comparsa de Bienvenido 'La comunidad' sobre las cuatro de la tarde. O la escalera de la Facultad de Medicina donde cantó desde las cinco la comparsa 'Los cobardes'. La muchedumbre llegaba casi hasta la pizzería Bella Italia que se sitúa enfrente. Un bosque de móviles grabando y fotografiando sobre un mar de cabezas al grupo de Martínez Ares, que ha regresado triunfal. Allí, horas antes había estado la chirigota de Vera Luque 'Los polvos egipcios'. Los y las cazafotos no dejan casi respirar a los componentes de las agrupaciones punteras, no digamos ya a sus cabezas visibles. Para recorrer diez metros se las ven y se las desean. Un agobio que sin embargo llevan como pueden. La globalización del Carnaval.

Si en San Juan de Dios, ante el Novelty, cantaban los niños Jesús del Canijo a las dos de la tarde, a la misma hora lo hacía la comparsa mixta 'Febrero' en la Catedral. Poco después podía verse a la chirigota 'Los agitadores' delante del Centro de la Mujer en El Palillero y al dúo 'Jartita de romería' (conocido como 'Con premeditación y alevosía') en Columela. No faltaron las coplas del maestro Enrique Villegas a cargo de su antología en la plaza de las Flores poco antes de las tres. No muy lejos, en Sacramento, 'OBDC. La vida es bella' congregaba a muchísimo público y en la Torre Tavira estaba la comparsa 'El circo de los payasos'.

Bien enchufado tenía al respetable, pasadas las tres, la chirigota femenina callejera 'Abbas, chícharos y alcauciles' en Hospital de Mujeres, recordando al grupo sueco y realizando una divertida versión de 'Chiquitita' con el alcalde como protagonista: 'Kichitita'. En la calle Sagasta actuaba la chirigota 'Por el segundo puente nos hicimos independientes, y en Solano unas particulares piedras de la Isla de Pascua llamadas 'Cabezón de la Isla', la conocida como Chirigota del Ukelele. El pasodoble de los Molina sonaba a gloria en El Palillero, ante el Banco Santander, y en la esquina contraria, en la puerta de Zara, 'Marcelino' Gago y sus colegas del comercio gaditano cuarteteaban con la asociación que con su nombre envía a la gente allí mismo donde el ya me entiende.

Con dificultades por el peso de Juan (el pesao ahora es él) y por las muestras de cariño -también con pesaos de por medio- de los aficionados conseguía alcanzar el tablao de la plaza de San Agustín la chirigota del Selu. Tras cantar se marcharon a la cervecería El Muelle, 1, donde las muestras de cariño continuaron junto a las peticiones de fotos. Allí Selu García Cossío reconocía que "está siendo increíble", mientras que uno de sus componentes, Padilla, decía que "ni con 'Lo que diga mi mujé' o 'Los enteraos' había vivido algo así". Y es que, claro, este año Selu le ha dado al pueblo dos personajes de su fauna, y claro, también está recibiendo el doble de cariño. Allí hizo tiempo la chirigota 'Si me pongo pesao me lo dices' hasta que a las ocho y media de la tarde se marcharon hasta la plaza de San Antonio, donde miles de personas esperaban para verlos en acción.

Eran las seis de la tarde cuando en la esquina del Novelty, en San Juan de Dios, cantaba la comparsa infantil 'El reino la Laja', primer premio en el Falla. Llegaba desde Pelota la batea con la comparsa 'La guayabera'. Los de Juan Carlos Aragón venían de ofrecer sus sones cubanos en la Catedral cantarían en esta misma plaza y luego en San Agustín. En San Juan de Dios, en el frontal de su batea, Ramoni sonaba a gloria en la esquina derecha, con esa voz tan portentosa, tan gaditana, tan de José Ramón de Castro. En la otra esquina, El Tron, con su inseparable contrabajo. La interpretación de la presentación y de sus pasodobles le levantó el vello al mismísimo Moret, como diría Paco Alba en 'Los belloteros', su última agrupación.

Más al centro, en el callejón contiguo al café Levante, las López Segovia y sus chirigóticas. Y en Santa Inés las elegantes señoronas inglesas que este año traen Los del Perchero, denominándose 'Quédate que queda té'. Ya de noche, pasadas las siete en la escalera del monumento a Moret estaba la comparsa de Tino Tovar 'El creador'.

Y en el Cañón, la chirigota de Manolito Santander 'Una especie en extinción' también demostraba que el 3x4 es casi una filosofía, un camino que siempre acaba en la Viña pero al que le gusta perderse por todo Cádiz.

Los tangos no cesaron de besar los vientos en una jornada marcada por el buen tiempo. Eran las tres de la tarde cuando bajaban la antigua calle Londres los coros 'La corte', 'La orden', 'Vámonos pal Mentidero' y 'Los acojonaos' de Luis Frade. También alrededor del Mercado Central giraban las bateas de 'Los del piso de arriba', 'Monoploy' y 'Welcome to cabaret'- A las cinco y media de la tarde 'Los Niños' y su 'Coroterapia' daban color y buen rollo a la plaza de Mina. Delante, en la calle Ancha regalaban tangos 'La cazuela' y 'Arriba el telón'.

El ambiente en Mina fue, como siempre, muy familiar. Mientras que la escalera del Museo Provincial acogía a grupos ilegales, alrededor de la plaza discurrían los coros. 'En el nombre del pádel, del pijo y del espíritu Franco', el coro de Valdez, hacía las delicias con esa forma tan particular de entender el Carnaval; y tras ellos, 'La guardia de la noche', 'Salimos del euro' o el citado coro de los Niños, que era el que más público atraía con ese tipo tan colorido.

Contento como unas castañuelas por el buen inicio del Carnaval, en cuanto a ambiente y climatología, se mostraba el concejal de Fiestas, Adrián Martínez de Pinillos. Sobre el tablao de la plaza de El Mentidero, y antes de comenzar el festival a beneficio de los afectados por el Síndrome de Rett, fue interrogado por Victoria de Haro, de Canal Sur en Cádiz. El edil ofreció una serie de recomendaciones al público, entre ellas tener paciencia en las aglomeraciones, responsabilidad y control con las bebidas alcohólicas y uso del transporte público para acceder al centro de la ciudad. Estuvo acompañado por la edil de Asuntos Sociales, Ana Fernández, que destacó el apoyo del Ayuntamiento a colectivos como 'Yo me uno al Retto' y la solidaridad de los gaditanos y de las agrupaciones del Carnaval.