El consejero de Educación de la Junta de Andalucía, Francisco Álvarez de la Chica, aseguró ayer que la denuncia interpuesta por los padres de un niño musulmán por maltrato psicológico contra uno de sus profesores en el instituto Menéndez Tolosa de La Línea que habló del jamón en clase "no ha lugar", y mostró su apoyo al docente.

El consejero indicó que una denuncia de este tipo "hace muy poco por la educación del conjunto de los ciudadanos yespecialmente por la del niño", razón por la que pidió "todo el apoyo de la sociedad" para el docente, José Reyes Fernández, "ya que si no apoyamos a los profesores en el desempeño de su tarea, no nos irá bien". Álvarez de la Chica aconsejó al profesor denunciado "que siga con su desempeño y no tenga en cuenta este tipo de cosas para que su tarea profesional no se vea menoscabada". Además, el consejero aseveró que considera la figura del profesor como "la piedra angular del éxito del sistema educativo", y destacó la calidad del profesorado andaluz. "Los alumnos andaluces están en muy buenas manos", finalizó.

Por otro lado, el ministro de Presidencia, Ramón Jáuregui, señaló que la denuncia "no puede prosperar en ningún sitio", y apuntó que puede ser "una denuncia infundada". Agregó que el caso es "inobjetable desde el punto de vista de la pedagogía de un maestro", aunque matizó que "no corresponde entrelazar en este asunto las enseñanzas que se imparten en las mezquitas". En cualquier caso, admitió que el Gobierno no es "ajeno a que, a veces, en la enseñanza del Islam puede haber pretensiones de integrismo religioso cercano al delito", y remarcó que la Policía "sigue de cerca estos casos".

También se pronunció el presidente de la Federación Española de Entidades Religiosas Islámicas, Mohamed Hamed, que calificó de "soberana tontería" la denuncia, "ya que el Corán prohibe su ingesta pero no que se hable del jamón". Añadió que aunque el jamón no es un producto permitido, "no significa que esté prohibido conocerlo y citarlo, al igual que el vino. De hecho, el Corán cita por su nombre al jamón y al cerdo y al vino".

La familia del alumno ha denunciado al profesor por maltrato psicológico ya que asegura que le dijo que "se fuese a su país" llamándole inútil además, al pedirle el niño por favor que no hablara de jamones. Reyes, por su parte, ha admitido que espetó al niño que lo que comiera o la religión que profesara no le importaba, negando haberle dicho que se fuese a su país.