Al final, el puerto de Cádiz se incorporará a la Plataforma Logística del Sur de Europa por invitación. Un proyecto en el que parecía de perogrullo el hecho de que debiera contar desde su núcleo con uno de los órganos vitales de esta futura plataforma logística como es el dominio portuario no ha contado con el puerto hasta ahora mismo.

El último consejo de administración de la Autoridad Portuaria de la Bahía de Cádiz (APBC) aprobó la integración del puerto de Cádiz en la Plataforma Logística Sur de Europa, de la que ya forman parte los ayuntamientos de Cádiz, Algeciras, Jerez, Chiclana, El Puerto y la Zona Franca.

Desde ese ansiado minuto uno de su incorporación de facto, el puerto pone sobre la mesa varias ideas. Destacan dos de ellas: propone abrir la participación a la plataforma de la iniciativa privada, otorgándole un papel "protagonista", y, en segundo lugar, potenciar la marca Estrecho de Gibraltar frente a la de Sur de Europa "como elemento diferenciador de la provincia y también para dotar a la plataforma de una estructura formal, que ayude al planteamiento de un programa, con unos objetivos y estrategias para conseguirlos".

La integración del puerto, con dos grandes protagonistas como son su futura nueva terminal de contenedores y La Cabezuela, no lograrán atraer muchas inversiones que podrían llegar fácilmente si no cuenta con un trazado ferroviario que conecte tanto la terminal de carga pesada como la de graneles con el resto del mundo por tren.

Y así lo hicieron ver las empresas e instituciones y administraciones que componen el consejo de administración de la Autoridad Portuaria, que aprobaron también en días pasados la propuesta de ratificar las acciones de su presidente encaminadas a conseguir la realización de las obras de acceso ferroviario Aletas-Cabezuela.

En este sentido, el presidente de la APBC, José Luis Blanco, puso sobre la mesa la potencialidad que el ferrocarril Aletas-Cabezuela tendría no sólo para las empresas y operadoras del entorno del muelle puertorrealeño, sino también para las instalaciones industriales de referencia como Airbus, Navantia, Dragados Off Shore y, sobre todo, para Las Aletas, zona logística de referencia para la Bahía.

De esta forma, el consejo aprobó demandar a las administraciones públicas un compromiso en firme en la ejecución de esta infraestructura, desde el convencimiento de que es la única alternativa para dotar a los operadores portuarios, al polígono industrial Trocadero-Río San Pedro y a las grandes industrias de la zona, como Airbus, Navantia y Dragados Off Shore, de un servicio esencial que les permitirá ser realmente competitivos.

Son muchos los activos industriales que aguardan con los brazos abiertos esta conexión vía tren. Nada más que en la Cabezuela son muchos los empresarios que llegaron, se instalaron e invirtieron bajo la promesa incumplida de que "pronto" tendrían un tren que pasaría casi por delante de sus naves. Nada más lejos de la realidad, al menos de momento, y menos viendo cómo los últimos Presupuestos Generales del Estado (PGE) incluían una insignificante partida de 200.000 euros que se sumarían a los 450.000 euros no gastados de este 2014.

Esto le preocupa a la APBC que no sabe cómo agradecer a los empresarios que han apostado por La Cabezuela los cerca de 90 millones de euros que han ido invirtiendo en este suelo portuario ubicado en Puerto Real desde 1990 viendo pasar frente a sus naves unas vías que no llevan a ninguna parte y que mueren donde muere el recinto.

Si a esos casi 90 millones se les suman los 30 millones que lleva inyectados allí la APBC, se habla de 123 millones de euros en inversiones que esperan el ferrocarril.

Desde 1990, el puerto ha invertido 7,4 millones en el Muelle Norte, 22,6 en el Muelle Sur y 3 millones en un dragado complementario. Por parte de los privados, que han desarrollado ni más ni menos que 123.000 metros cuadrados de naves cubiertas para los graneles sólidos, han invertido 75 millones de euros que se suman a los 12 que les han constado cuatro grúas de última generación y altísimo rendimiento. Sin olvidar que de estas empresas privadas y de su confianza depositada en una dársena que necesita sí o sí tren penden y dependen 8.000 empleos entre directos, indirectos e inducidos, según cálculos facilitados por la APBC.

Claro está que el puerto de la Bahía de Cádiz y todas las empresas instaladas en su Cabezuela serán las principales beneficiadas el día en el que el Gobierno ponga los millones y no los miles de euros que hacen falta para unos cuantos metros de vía de tren que supondrían un respiro para sus industriales. La APBC insiste en que, de manera colateral, empresas como Airbus, Navantia, Dragados Off Shore, o la propia Universidad y, cómo no, el futuro Polígono de Las Aletas se beneficiarán de este trazado ferroviario.

El puerto lo ejemplifica de manera muy clara diciendo que a Airbus Puerto Real le salió redonda la posibilidad de construir el estabilizador de cola del A-380 gracias, en parte, a que Cabezuela le brinda una salida por mar. Pues algo ocurrirá según la APBC con las Aletas cuyo futuro podría depender, según estiman, en parte, de una conexión por tren que aún está por ver.