Una estrella en Camposoto

Esta es la clave. Si se pincha en you tube Superantonio aparece un vídeo. Abajo se informa del número de visitas. El pasado viernes eran algo más de 20.000; ayer, a las siete de la tarde, ya se había alcanzado la cifra de 458.339. Se ha subtitulado en varios idiomas, entre ellos el noruego, y en Miami se ha distribuido en todas las escuelas. La ternura era esto.

¿Qué tiene este vídeo? A Antonio. Antonio tiene cinco años y es posiblemente el más popular de su clase en el colegio Camposoto, de San Fernando. Quizá sea por cosas como ésta que cuenta Cristina, su monitora, en esta pequeña joya de cuatro minutos veintiséis segundos: Antonio observa a un compañero que está triste. Antonio está intrigado. Pregunta a su madre que qué le pasa, ¿que está triste?, le voy a escribir una carta. La carta pone: Gracias por ser mi amigo.

¿Qué tiene de especial Antonio? Hay una leyenda celta por la que las hadas no son las hadas con alitas que conocemos. Las hadas se llevan a los niños y, a cambio, dejan niños hada. Eso puede ser una metáfora. La realidad es que el diagnóstico de Antonio es parálisis cerebral, con todo lo que eso significa, que significa muchas cosas y, al tiempo, muy pocas, como tantos otros diagnósticos, que encuadran niños distintos en un sólo término. Cada niño es un mundo. Antonio "va en carrito", como explica un compañero. Tiene problemas de motricidad, pero altas capacidades cognitivas. Puede ser al revés o puede haber otras muchas combinaciones. La parálisis cerebral identifica a individuos muy diversos.

Emilio Hurtado, coordinador provincial de Necesidades Educativas Especiales, incide en eso: "Cada año se escolarizan unos 200 niños con discapacidad en la provincia y las ayudas técnicas tienen que ser a la carta. No hay dos niños iguales. Sí, puede venir con el diagnóstico de autista, pero hay miles de formas de autismo. Ocurre igual con la parálisis cerebral, con los transtornos de conducta... Al niño hay que conocerlo y hasta que lo conocemos y sabemos cómo actuar con él pasa un tiempo".

"Hola, me llamo Antonio y tengo cinco años". Sus compañeros le hacen la ola. "Si se va Antonio del cole, me voy yo", dice con determinación uno de sus compañeros en el vídeo que le ha hecho famoso, que le ha convertido en una estrella. Antonio está en su clase, en su pupitre especial, rodeado de sus amigos y no paran de pasar, de introducirse en su lugar sagrado, una cámara de televisión tras otra. Antonio lleva mal la fama. Parece agotarle. Ya le ha dicho en confianza a Cristina, su monitora, que ya ha hecho muchas películas, que ya no quiere hacer más. Quiere seguir recortando con Cristina las fotografías.

Todo empezó cuando la periodista Ana Pastor vio el vídeo realizado por una productora de jóvenes jerezanos, estamosgrabando.com, que trabajó gratuitamente en esta felicitación navideña del área de educación especial. Escribió un tuit: "Debería ser tender topic".

Todo se desató. En el momento en que llego al moderno colegio Camposoto, el equipo que arropa a Antonio y a los otros 15 niños con necesidades especiales del centro se apiña junto a la radio, en el que el programa de mayor audiencia de las mañanas, Hoy por Hoy, de la cadena Ser, está entrevistando al director del centro, que empieza a mostrar también signos de agotamiento ante tanta expectación. En breve llegará un equipo de Andalucía Directo. Hoy tienen cita en el colegio con el programa de Ana Rosa. Ya han pasado por aquí programas de casi todas las cadenas de televisión. La Nación, uno de los principales periódicos de Buenos Aires, le ha dedicado un pequeño reportaje. "Estamos desbordados", reconocen en el colegio, que simplemente habían querido colaborar en una pequeña historia de consumo interno para la comunidad educativa.

Hurtado no se esperaba nada de esto, pero admite que es una ocasión para dar a conocer las posibilidades de la inclusión, que la inclsuión es posible, "que no todas las noticias son malas en el mundo de la educación, que hay muchos profesionales muy implicados en esto. Y que hay resultados". Profesionales como Javier Navarrete, que es McGyver. Ingeniero informático, su tarea en el área de recursos es encontrar el dispositivo idóneo para que cada niño con necesidades especiales se relaciones con el mundo, se comunique. La informática y darle vueltas al coco son sus armas. El fue el que seleccionó a Antonio para este vídeo. Acertó. "Se llega más con la emoción que con el razonamiento", reflexiona.

Antonio y todos sus amigos, todos los amigos que aprenden cada día de Antonio, le abrazan. Son el elenco de este éxito en la Red. Más abrazos. "Ahhh, que me estrujas", se queja Antonio.