"Es el padre de la arquitectura moderna, ea, ya lo he dicho, al menos para mi", Jesús Lázaro habla sobre la figura de Le Corbusier. Es inevitable. "Fue un arquitecto visionario que no sólo pensaba en la ciudad como un conjunto de edificios, iba más allá, ponía en juego el elemento utópico". El joven arquitecto gaditano recorre, con pasión, las líneas profesionales y vitales del suizo. Y es que Lázaro, junto con Francisco Sesé, comisaria la muestra Chandigarh: La construcción de un paisaje que puede visitarse en el Colegio de Arquitectos de Cádiz hasta el 20 de noviembre.

La exposición repasa las diferentes fases de la construcción de la ciudad, que sería la nueva capital de India tras su independencia del imperio británico. Una ciudad que levantaría Le Corbusier al final de su vida tras el fallido encargo anterior al equipo formado por el americano Albert Mayer y el polaco Matthew Nowicki. "Así, hemos incluido, también, en la exposición los proyectos de estos arquitectos que fueron el planteamiento inicial de esta ciudad que, luego, Le Corbusier mejoraría", explica Lázaro.

"A Le Corbusier le llega el encargo cuando ya lleva 40 años de investigación sobre diferentes aspectos de la construcción de una ciudad. Establece tres teorías ideales que nunca se llegaron a realizar pero con Chandigarh le llega la oportunidad que lleva esperando toda su vida", dice.

Así, durante la muestra el visitante puede observar, a través de fotografías y bocetos realizados por la mano de Le Corbusier, cómo el arquitecto planteó una ciudad mallada y salpicada por una serie de espacios libres en la que se superpone la red comercial. "No hay ni segregación ni una zonificación estricta", apunta el comisario que advierte que el suizo nacionalizado francés "también reflejó en su obra gran parte de sus preocupaciones, como el tema del soleamiento -el efecto del sol en la ciudad-, sobre todo, en un contexto climático tan especial como el de la India".

Otro de los apartados de la muestra está reservado a "un breve desarrollo" de buena parte de los edificios que Le Corbusier proyectó en Chandigarh. "El Capitolio, por ejemplo, es el edificio más representativo del gobierno municipal, es una zona casi mística enmarcada, al fondo, por la cordillera del Himalaya. Es una visión casi barroca pero basada en la arquitectura tradicional mogol, con grandes espacios abiertos para el disfrute del pueblo", ejemplifica el comisario.

Además de los bocetos y fotografías, la exposición incluye litografías extraídas de buena parte de los libros donde Le Corbusier sintetizó sus ideas. "Era un personaje muy complicado y, ese aspecto, también hemos querido que esté presente, de algún modo, en la exposición", anhela Lázaro que, por ello, ha incluido el Poema del ángulo recto y los dibujos en lo que Le Corbusier plasmó las ideas contenidas en los versos.

Chandigarh: La construcción de un paisaje concluye con una cita del arquitecto: "Madre, te mando esta pequeña carta sin ninguna modestia, sino lleno de orgullo, para que sepas que por fin, el arquitecto, el urbanista, el pintor y el escultor han dado luz aquí a la poesía". "Creo que refleja muy bien esa imagen privada tan distinta a la fama de huraño que tenía", descubre Lázaro.