El fútbol base vuelve a sufrir un lamentable caso de xenofobia. El pasado sábado, el partido de Segunda Andaluza infantil entre el CD La Salle de Puerto Real y el San Fernando CD Isleño B, disputado en las instalaciones del Virgen del Carmen de la localidad puertorrealeña, fue suspendido por los insultos racistas de un espectador hacia un jugador del equipo visitante. Conviene recordar que de solo 12 años. Ante la gravedad de los hechos, el árbitro Miguel Ángel Gutiérrez Rique no dudó en decretar la suspensión del encuentro cuando restaban unos minutos para el final, siendo en esos momentos el marcador de 2-0 a favor de los locales. El Comité de Competición será el que decida reanudar el partido o darlo por concluido con dicho marcador.

Tras este lamentable incidente, los clubes decidieron unir sus fuerzas para intentar alejar esta imagen de los terrenos y mediante un comunicado mostraron su "máxima repulsa e indignación" ante lo sucedido en el partido. De forma conjunta manifestaron que "lucharemos codo a codo para que incidentes de este calibre se erradiquen de una vez por todas de nuestros campos de fútbol" y que realizarán las alegaciones pertinentes "para que la persona que ha realizado los insultos xenófobos sea castigada según el código disciplinario que regula en la justicia deportiva estos aspectos, que lamentamos sigan ocurriendo en el siglo XXI".

El CD La Salle y el San Fernando CD "apuestan por la integración y la convivencia de diferentes razas e ideologías, siendo este deporte una fuente inagotable de integración social". La entidad isleña, por su parte, quiso agradecer " a un club modelo como es La Salle de Puerto Real el comportamiento mostrado hacia el San Fernando CD y hacia la familia del jugador, ofreciéndose en todo momento para la localización del infractor y para su denuncia ante los comités deportivos pertinentes".