El Seprona interviene 400 kilos de pescado y marisco con ácido bórico

La Guardia Civil y los inspectores de Sanidad también descubrieron en una nave del muelle pesquero sangre de cerdo que se utilizaba para darle un mejor aspecto al género, que había sido adquirido a principio de junio

El Seprona interviene 400 kilos de pescado y marisco con ácido bórico
El Seprona interviene 400 kilos de pescado y marisco con ácido bórico / M. G.
Melchor Mateo / Cádiz

31 de agosto 2011 - 01:00

Efectivos del Seprona de la Guardia Civil de Cádiz junto a los servicios de inspección de la Consejería de Salud de la Junta intervinieron ayer casi 400 kilogramos de pescados y mariscos en las instalaciones del muelle pesquero ya que estaban manipulados en deficientes condiciones higiénico-sanitarias.

La intervención se produjo en dos establecimientos que, según la Guardia Civil, son clandestinos, ya que carecen de licencia de apertura y del correspondiente Registro sanitario.

En el interior de las naves el Seprona encontró el pescado y el marisco junto a un recipiente con sangre de cerdo y otro bote con unos polvos blancos que resultaron ser ácido bórico.

Este aditivo es fraudulento y se utiliza para conservar el marisco en mejor estado. De hecho, tradicionalmente se hacía cuando las cabezas de las gambas se empezaban a poner negras con el paso del tiempo. En este caso el responsable de ambos establecimientos reconoció que lo utilizaba para la conservación del marisco. De este modo hace que los productos tengan un mejor aspecto para su venta.

La sangre de cerdo, por su parte, se le impregna al pescado para darle una apariencia de frescura y es algo que para el Seprona supone una novedad.

Aunque trataban de darle una apariencia de frescura, lo cierto es que el albarán de los productos indica que fueron adquiridos el 7 de junio de 2011 y la fecha de validez del despacho era el 5 de septiembre.

Debido a todo lo encontrado, la Guardia Civil inmovilizó los pescados y mariscos hallados en el local y se retiraron los productos para su posterior análisis por la delegación de Salud.

Se les ha denunciado por carecer de licencia de apertura, de Registro Sanitario y por una infracción a la normativa sobre pesca y protección de consumidores y usuarios.

Hace unos días también fueron retirados en Mercamadrid 2.000 kilos de gambas a las que se les había detectado ácido bórico.

Entre los productos que estaban en el Muelle Pesquero de la capital gaditana había merluzas, cazón y chocos, además de los referidos mariscos.

Utilizado desde el siglo XIX en Italia para la conservación de mantequilla y margarina, también se ha empleado en la conservación de carne, pescado y mariscos. Es relativamente tóxico, conociéndose bastantes casos de intoxicación, sobre todo en niños. Además se absorbe bien y se elimina mal, por lo que tiende a acumularse en el organismo. Esto hace que su uso esté prohibido en todo el mundo, con la excepción de su empleo para conservar el caviar.

En España se han detectado con cierta frecuencia casos de uso fraudulento del ácido bórico en la conservación de mariscos, para evitar el oscurecimiento de las cabezas de gambas y langostinos.

Como curiosidad, a los bebés no se les suele incluir el pescado en la dieta hasta el noveno mes porque entre otras cuestiones tiene un alto potencial alergénico. Pero a ello se le une también la detección de elementos tóxicos como metales y también el ácido bórico.

Esta sustancia tiene también un uso distinto pero relacionado con la conservación de alimentos que están en mal estado y es que sirven también para eliminar el olor en los pies. Está comprobado que es tóxico y puede ser cancerígeno.

El establecimiento se dedicaba a la venta al público y también a la distribución de los productos por establecimientos hosteleros.

La operación que llevó a cabo el Seprona en el día de ayer no fue una simple casualidad, ya que desde la Guardia Civil se intuía que se tenían los productos en esas condiciones higiénicos sanitarias.

En algunos casos la situación puede ser aún peor ya que se le añade formol a los alimentos, que tiene una mayor toxicidad que el ácido bórico.

Para detectar el buen estado del pescado, según los expertos, es fundamental que tengan un buen olor a mar y a alga, un buen color de ojos y que no se caigan las escamas al tocarlo. Aún así a veces es complicado detectar el mal estado del pescado.

Las multas para las personas o empresas que utilizan el ácido bórico para una mejor conservación de los alimentos pueden llegar a los 15.000 euros, además del decomiso de toda la mercancía, que termina siendo destruida por el peligro que entraña para la salud.

stats