Entre 70 y 80 bomberos del Consorcio Provincial Contra Incendio de Huelva no fueron movilizados pese a su disponibilidad. Así lo denunciaron ayer al tiempo que expresaron su indignación por la situación que vivieron mientras las llamas acababan con más de 8.000 hectáreas de arbolado y matorral y ponían en riesgo poblados y alojamientos turísticos en el entorno de Doñana.

Afirman que inicialmente ninguno de los 130 bomberos de los nueves retenes del consorcio fueron movilizados, a pesar de que se ofrecieron voluntarios. Creen que no se contó con ellos para no evidenciar la precariedad existente en los parques de bomberos, de ahí que se les haya obviado a pesar de que la situación era preocupante, hacía falta personas y toda ayuda era bienvenida.

Tras su insistencia, finalmente sí llamaron a varias unidades, que fueron las primeras que intervinieron en las casas de la zona de Bonares y el camping Doñana. Su actuación evitó que ardieran varias cabañas del camping, donde quedaron calcinadas unas 200 caravanas y casi todas las casas prefabricadas.