La empresa seleccionada para realizar la ampliación del centro cívico Eugenio Pérez Gener de La Ardila ya ha presentado toda la documentación requerida para formalizar la adjudicación de este contrato. Tenía un plazo de un mes para ello que no ha apurado. Ahora el servicio de Constratación debe verificar esos documentos -plan de seguridad y seguros, entre otras cuestiones- como paso previo a la firma del decreto de adjudicación. Las obras permitirán contar en la zona con unas instalaciones con las que dar cobertura a al tan demandado centro de día de mayores. La ciudad pasaría a tener dos. La intención es aprovechar el nuevo edificio al máximo y para ello el proyecto contempla la reconversión de espacios asumiendo otros usos en el futuro, lo que se suma a la versatilidad que se ha pretendido con el diseño ideado.

"Es un edificio muy dinámico, más flexible de lo que podría ser una construcción encorsetada en un espacio urbano cerrado", explica la concejala de Desarrollo Urbano, Claudia Márquez, que destaca su integración con el parque existente en la zona hacia el que tiene vistas. Las nuevas dependencias se han ideado como un anexo al centro cívico de La Ardila, de manera que se considera una ampliación de éste. Sin embargo, podrá funcionar de manera autónoma. De hecho, ese es el objetivo. Esto es posible porque tendrá un acceso desde las instalaciones, pero también una entrada independiente.

Se busca que el patio interior, al aire libre, se convierta en un espacio agradable de descansoEs un edifico integrado en un parque, más flexible que en un espacio urbano cerrado

La ampliación se realizará a la izquierda del Eugenio Pérez Gener. "No vamos a alterar su cimentación, ni siquiera se ha analizado porque optamos por respetar la estructura y preservar la seguridad del edificio", detalla Márquez. Incluso, la conexión se realizará a través de una pasarela elevada. Entre ambas construcciones se generará una especie de plaza interna, un patio al aire libre. "Será un espacio resguardado, donde los usuarios del propio centro cívico o su ampliación podrán descansar; un lugar que podrán usar entre actividades", añade la responsable de Urbanismo que habla de que cualquier ciudadano podría acceder para disfrutar de esa superficie que tendrá vistas al parque. Eso sí sólo será transitable mientras el edificio esté abierto. Una vez se cierre no se podrá entrar. "Le dará atractivo a los dos edificios, por ser un espacio recogido, agradable, al aire libre", insiste sobre esta particularidad del proyecto.

Se busca con todas estas cuestiones que el edificio esté relacionado con su entorno para que además de un aulario pueda aprovecharse para reuniones o incluso exposiciones. Habrá aulas multifuncionales de distintos tamaños para ello, concretamente tres con superficies entre algo más de 19 metros cuadrados y casi 39 metros cuadrados. El patio ya mencionado cuenta con 104 metros cuadrados. Dos vestíbulos, áreas de distribución, una recepción -que puede compartimentarse en un futuro-, un despacho, una sala de almacenamiento y un núcleo de aseos completan las instalaciones diseñadas como un conjunto de volúmenes. "Aunque teníamos la conexión con el centro cívico no se podía obviar su independencia, por lo que era necesario que tuviera aseos, despacho o una recepción propia", apunta Claudia Márquez sobre la versatilidad con la que conscientemente se ha querido dotar a la construcción. "Para que se pudiera vivir de distintas maneras", matiza. El almacén permitirá despejar de mobiliario cualquiera de las salas o guardar el material aprovechable para determinadas actividades.

El edificio tendrá un sistema de climatización adecuado para controlar el frío y el calor, incluso para evitar que el sol deslumbre en el interior a través de las cristaleras, por lo que tendrá un tratamiento de protección solar. "Queremos que sea una espacio agradable", finaliza la edil socialista.