El arquitecto español Alberto Campo Baeza inauguró ayer en Tokio la exposición El árbol de la creación, que recoge una evolución de su obra y a la que asistió el arquitecto japonés más reconocido, Tadao Ando. La muestra, exhibida en la Galería Ma de Tokio, trata de "explicar a los japoneses el gran momento de la arquitectura española a través de la obra de uno de nuestros maestros más importantes", explicó el comisario de la exposición, Manuel Blanco.

El árbol de la creación integra un paisaje con la obra del vallisoletano Campo Baeza, mediante la recreación de un patio similar al de la Guardería que diseñó para el grupo Benetton en la ciudad italiana de Ponzano y se ha instalado un fondo con la imagen de la Casa Guerrero, en Cádiz.

La exposición se distribuye en dos plantas: en la primera de ellas se ha creado un árbol con los dibujos originales del arquitecto que muestra cómo se han ido gestando sus proyectos, mientras que en la segunda los visitantes pueden observar diversas maquetas de Campo Baeza y escuchar sus explicaciones en un vídeo.

El montaje, "hermosísimo" para Campo Baeza y "muy alabado por todos los arquitectos de Japón", entre ellos Kengo Kuma, Kazuyo Sejima o Tadao Ando, permanecerá abierto al público hasta el 29 de agosto en Tokio. "No tengo más que motivos para dar gracias por todos los costados por todo lo que aquí está sucediendo», indicó Baeza. El arquitecto hizo también referencia a algunas claves de su arquitectura y, en general, de la de cualquier creador, entre ellas la gravedad o la luz, de la que dijo es tan necesaria en su trabajo como "la sal en la vida".

Tras la reciente inauguración del Museo de la Memoria de Andalucía, en Granada, Campo Baeza tiene su horizonte más próximo ahora en Las Salinas de Janubio, en Lanzarote, donde levanta un centro de interpretación del paisaje, que constituye el proyecto en marcha en el que mayor ilusión deposita, aseguró.