El Puerto

Las calles del centro se convierten en auténticas obras de arte

  • Un total de 30 artistas salen a la calle gracias a la X edición del Concurso de Pintura Rápida

La muestra de todos los trabajos realizados tomó también la calle Luna para el disfrute de todos los viandantes.

La muestra de todos los trabajos realizados tomó también la calle Luna para el disfrute de todos los viandantes. / andrés mora

Todo es diferente desde el punto de vista que se mire y un claro ejemplo de ello ha sido la X edición del Concurso de Pintura Rápida bajo el lema 'El Puerto de Santa María: sus calles, sus monumentos y sus gentes'. Un certamen que se celebró durante toda la jornada de ayer gracias a la implicación de la Concejalía de Cultura y la colaboración de Los Portales, Suinbasa y Da Massimo, quienes unidos consiguieron rescatar este concurso que llevaba seis años en el olvido. Además se ha contado con el apoyo de las empresas bodegueras Osborne y Caballero, los cuales cedieron sus espacios para que los artistas se inspiraran tanto en la bodega de Mora como en los jardines de la calle San Francisco.

Un total de 30 artistas plásticos se echaron a la calle para plasmar en sus cuadros sus versiones de las calles y plazas del centro, creando auténticas obras de arte y poniendo en valor la riqueza del casco histórico portuense.

Mediante el empleo de diversas técnicas pictóricas, sus pinceles comenzaron a cobrar vida retratando las calles de la ciudad alrededor de las nueve de la mañana, tras el sellado de los cuadros en el edificio Alfonso X ' El Sabio' que se realizó hasta las diez.

Desde por la mañana y hasta las seis de la tarde, los portuenses y visitantes han podido disfrutar del trabajo de estos 30 artistas los cuales han aprovechado cada plaza, cada esquina y cada rincón del centro para ensalzar tanto lo mejor de la ciudad como lo mejor de ellos mismos.

A partir de las seis de la tarde, los cuadros quedaron expuestos en la calle Luna, haciendo de ésta toda una sala de exposiciones al aire libre donde se apreciaba el trabajo realizado por los pintores durante todo el día.

La muestra ofrecía una gran belleza de la ciudad, quedando retratados lugares emblemáticos como la plaza Isaac Peral, el Parque de la Victoria o la plaza de El Polvorista, la complejidad arquitectónica con todo lujo de detalles de la Iglesia Mayor Prioral o parte del Parque Calderón junto a su río Guadalete y los barquitos que atracan en él.

Una vez visto todos los cuadros y tras dos horas de deliberaciones, el jurado hizo público alrededor de las ocho de la tarde los ganadores de los numerosos premios establecidos.

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