El Balón de Cádiz acertó con la portería del Rayo Sanluqueño en el tiempo de descuento. Y lo hizo después de un partido bastante flojo, de los que no tiene acostumbrado, en el que la salida del balón en la zona ancha no fue la más adecuada. Si a esto le unimos que el Rayo mantuvo el orden en casi todas sus líneas y que en ningún momento se arrugó, se entiende el sufrimiento de los pupilos de Jesús Casas.

Muy pronto se vio que no era el día de los locales. Los problemas en el centro para mover el esférico con rapidez y elegir la opción más lógica pesaron como un muro. Pese a todo, las mejores ocasiones hasta el descanso cayeron de lado balonista.

Tras el descanso no mejoró la imagen del Balón, que seguía sufriendo para encontrar su propia identidad. En el único error de Adri se rompió el partido. El portero del Rayo Sanluqueño se tragó un centro pasado que Javi Hernández cabeceó en el segundo palo. Era el 1-0 y el minuto 92.