A los jugadores cadistas les llega a dar un poco de vergüenza pedir esfuerzos a la afición después de los disgustos que le llevan dando en las últimas temporadas. Pero el domingo el equipo se juega mucho y no queda más remedio que pedir otro favor a los seguidores amarillos para que el Carranza presente sus mejores galas para poner las cosas complicadas al equipo vasco.

Fleurquin, capitán de la plantilla, toma la voz cantante y se une a los dirigentes del club para hacer ver a los seguidores cadistas de la necesidad de llenar el Carranza en el choque ante la Real Sociedad: "Como capitán hago un llamamiento a nuestra afición. Esperamos su apoyo en el inicio y después tendremos que ganarnos que se mantenga su ánimo haciendo bien las cosas dentro del campo. Es un partido en el que nos jugamos mucho y los futbolistas somos los primeros que queremos ganar, pero necesitamos a nuestros aficionados".

El uruguayo cree que tampoco es conveniente "sobrecargar de presión" el partido del domingo, pero tiene claro que puede marcar el futuro del equipo: "Es un partido muy importante para nosotros, pero no es a vida o muerte porque nadie va a morir, pase lo que pase. Tras perder en Ferrol las cosas se han complicado para nosotros, pero estamos con la moral alta y estamos convencidos de que vamos a ganar a la Real Sociedad".

Se puede pensar que el partido puede venir bien a los jugadores amarillos porque se le suelen dar mejor los equipos que vienen al Carranza a jugar que aquellos que se cierran para salir a la contra. Puede ser una ventaja, pero Fleurquin no se fía del todo: "Los tres puntos valen lo mismo contra el rival que sea, pero quizá nos ha ido mejor con los equipos de arriba. Cuando hemos estado a un buen nivel, hemos sido capaces de ganar a cualquiera. La pena es que hemos sido muy irregulares y ahora nos vemos así de apurados. Ojalá nos salgan bien las cosas para darle una alegría a nuestra gente tras tantos disgustos".

No le da mucha importancia el jugador cadista a las ausencias que arrastra el cuadro vasco en el centro del campo. Están confirmadas las bajas de Garitano y de Aranburu, pero no cree que eso afecte al funcionamiento colectivo de Juanma Lillo: "Los equipos que están arriba se caracterizan por tener plantillas compensadas y las bajas no se suelen notar mucho. En todo caso, se echa de menos a la gente decisiva de la parte de arriba, pero no a jugadores de mi posición".