Un año más, el Cádiz está siguiendo los pasos de Maldonado. Durante el pasado verano se habló y mucho del interés del club amarillo por lograr el fichaje del futbolista isleño, pero finalmente optó por marcharse al Nástic de Tarragona. Recientemente la maquinaria ha vuelto a ponerse en marcha y se han producido contactos directamente con el futbolista, al que le queda un año de contrato con el Betis.

A estas alturas no se puede decir que sea un objetivo prioritario del club cadista porque está dentro de una lista en la que aparecen otros jugadores, como Moreno, del Poli Ejido, pero el hecho de que el Cádiz se haya puesto en contacto con él hace pensar en que tiene opciones de terminar, por fin, de amarillo.

Para ello, lo primero que va a hacer el delantero es negociar con el Betis la rescisión de su contrato. Como sucede en el caso de Dani, Maldonado no quiere continuar en el club verdiblanco y no desea estar pendiente de quién será el entrenador y de ver si entrará en sus planes. Si consigue convencer a Lopera para quedar liberado, estará en disposición de negociar con el Cádiz o con otros clubes.