Al Barcelona le ha llegado la hora de la verdad esta pretemporada y hoy deberá afrontar el desafío de superar al Wisla de Cracovia en la tercera ronda de la fase preliminar de la Liga de Campeones, con la disputa del partido de ida, que está programado a las 21:45 horas en el Camp Nou.

La eliminatoria contra el Wisla se ha convertido para el Barcelona en el todo o nada. Si supera a su rival, como ya hiciese en la previa de la temporada 2001-02 por un total de 5-3 (único enfrentamiento entre ambos en partido oficial), el Barcelona entrará en la Liga de Campeones y a finales de agosto conocerá a sus futuros rivales en la liguilla. En caso contrario, le espera la devaluada Copa de la UEFA.

El tránsito del Barcelona esta pretemporada no ha podido ser más feliz en cuanto a resultados y expectativas, al vencer por goleada en los cinco partidos disputados. Un nuevo equipo, que también estrena técnico y al que han llegado cinco jugadores, ha ofrecido destellos de las posibilidades que puede ofrecer el Barcelona esta temporada. Sólo le cabe ponerlo en práctica en un escenario oficial como es el de hoy contra el Wisla.

Por ahora, la marcha de dos de sus grandes jugadores (Ronaldinho y Deco) no ha causado ninguna dependencia y el fútbol del Barça vuelve a ser fluido, dominador y letal, en el que ha vuelto a destacar el acierto de un Samuel Eto'o condenado a ser traspasado, pero que finalmente se acomodará en el vestuario tras aceptar el desafío de su continuidad el entrenador.

El Barça llega en un buen momento al choque contra el Wisla. Sólo dos aspectos no han encajado: la ausencia ya irreversible de Messi, que continúa disputando los Juegos de Pekín y, en segunda instancia, las dudas que siguen planeando sobre el francés Henry, incluido en muchas quinielas de traspasos y supuestosintereses para volver a Inglaterra.