El Arcos dejó escapar dos puntos del Antonio Barbadillo en un partido indeciso y con dudas, pero con buen fútbol. Como suele hacer el equipo de Mariano Suárez, empezó el partido con mucha fuerza gracias a la velocidad de algunos de sus jugadores, como el punta Juan Gómez. En esta jornada, la plantilla se presentó ante su afición con varios cambios y novedades en el once inicial y con dos debuts: los de Borja, en la portería, y Mariño.

Una jornada más, el Arcos se encargó de encarrilar el partido muy pronto. Juan Gómez tuvo mucha pujanza y puso toda la carne en el asador con varios centros, pero estos no eran rematados por sus compañeros. Hasta que Prieto anotó un bonito gol que el mismo Juan Gómez centró desde la banda izquierda minutos antes de finalizar la primera mitad del encuentro. Pero después, el equipo perdió fuerza y situación en el campo y se vio superado por el rival. Los lepeños consiguieron empatar el gol local hasta en dos ocasiones gracias a su gran calidad técnica y a la posesión que tuvieron durante todo el partido, sobre todo en el centro del campo. Antes del descanso, Tore lanzó una falta que despejó Borja, pero Louise Robles alcanzó el rechace del portero local y puso el empate en el marcador.

Ya en la segunda mitad, ambos conjuntos salieron a presionar. Aunque ninguno de los dos equipos dominó de manera clara, el Arcos, de nuevo, se puso por delante con una jugada que demostró destreza y picardía por parte de los chicos de Mariano Suárez. Un lanzamiento de falta muy rápido dejó a la defensa visitante desprevenida y Juan Gómez se encargó de hacer el segundo gol. Un tanto muy celebrado tanto por los jugadores como por los más de 200 espectadores que les acompañaron en el campo. El origen de este gol está en la gran jugada que el joven Lionel, quien no hacía mucho que había saltado al terreno de juego, desarrolló gracias a su velocidad y desborde y a su fútbol atrevido. Parecía que con el gol de Juan Gómez los locales ya tenían el partido en sus manos. Pero otra vez a balón parado el San Roque logró empatar el partido por mediación de Sabo cuando apenas quedaban cinco minutos de partido.