Simone Righi, el ciudadano italiano que estaba en prisión desde hace dos meses por un presunto intento de agresión a varios concejales del Ayuntamiento en una manifestación contra el maltrato de animales, salió ayer de la cárcel de Puerto II. Alrededor de las seis de la tarde salió por la puerta, donde la esperaba su pareja Jo Fiori y un grupo de personas que se han solidarizado con el italiano.

Un fuerte abrazo y un gran beso de la pareja de italianos precedió a las primeras palabras y a algunos momentos de emoción. Como relató la propia Jo Fiori, se ha encontrado a una persona "muy sensible pero con muchas ganas de construir".

Simone Righi, en declaraciones a Diario de Cádiz, dio las gracias a todas las personas que se han solidarizado con él durante estos dos meses de cautiverio "porque es lo que me ha dado la fuerza para resistir". Righi cree que, al menos, todo lo que ha pasado "incluida la muertes de sus perros, no ha sido en vano", ya que al final se ha cerrado la perrera de El Refugio.

Para el italiano "estos dos meses no han tenido ningún sentido", ya que él proclama que es "inocente" de lo que se le acusa: "sería una cosa de locos intentar agredir a estar personas en un lugar donde hay 3.500 personas, con prensa incluso".

Simoni Righi asegura que dentro de la cárcel "he estado contando los minutos hasta que no consiguiera la libertad" y añade que ahora ve las cosas de otra manera "porque un hombre se da cuenta de lo que tiene hasta que no se lo quitan".

Righi afirma que dentro de la prisión se ven todas las cosas de distinto modo "ya que hay que hacer de todo para mantener la integridad. Hay mucho malo pero también mucho bueno".

Asimismo, resaltó que ha salido "mucho más fuerte de lo que entró en prisión" un 11 de diciembre, cuatro días después de ser detenido.

El ciudadano italiano salió ayer a la calle gracias a que se aceptó el recurso presentado por su abogado Ignacio Quintana, por el que se le consiguió reducir la fianza de los 9.000 euros iniciales hasta dejarla en los 3.000 actuales. Ahora se continuará con la instrucción del proceso, en el que también está imputada una cuidadana gaditana. Una vez que se acabe con la misma se tendrá que decidir si el asunto va a juicio o se archiva.