El alcalde de Cádiz, José María González Santos, ha confesado hoy que estas dos primeras semanas en el cargo "están siendo apasionantes" pero también "difíciles, complicadas y con muchísimos trabajo", lo que le ha llevado a bromear: "tengo dolor de muñeca de firmar, firmar y firmar".

González Santos ha hecho estos comentarios al ser preguntado sobre cómo están siendo sus primeros días en el cargo en la rueda de prensa que ha ofrecido hoy tras la celebración de la primera Junta de Gobierno Local del nuevo equipo municipal de Por Cádiz sí se Puede.

Una Junta de Gobierno que se ha celebrado cuando aún no se ha configurado el reparto de áreas de responsabilidad del nuevo gobierno municipal, a la espera de que los dos concejales de Ganar Cádiz en Común se sumen a este ejecutivo.

Una primera reunión del nuevo equipo municipal que, según ha señalado González, demuestra que "la ciudad tiene gobierno, sigue funcionando".

"Hemos aprobado distintas propuestas de rango cotidiano", ha indicado el alcalde, que ha destacado su "orgullo" por haber firmado en esta primera Junta de Gobierno la orden por la que se ofrecerá ayuda alimentaria a los niños y niñas en situación de exclusión durante el verano, con un procedimiento que "ha tenido muy en cuenta la aportación y recomendación de los funcionarios de servicios sociales". "Era una de las cien primeras medidas que proponíamos y en menos de dos semanas se ha hecho realidad", ha comentado.

Sobre las duras críticas que ha recibido del equipo municipal del PP, que preside la que durante veinte años consecutivos ha sido alcaldesa de la ciudad, Teófila Martínez, González Santos ha reconocido que esperaba los ataques, "pero con algo más de contenido político".

"No esperaba que (la crítica) fuera tan pobre", ha indicado en referencia a las palabras del portavoz del grupo municipal popular Ignacio Romaní, que le ha dirigido frases como: "si quieren ver al alcalde de la ciudad trabajar le tienen que poner una cámara delante", después de que el pasado lunes se personara en la puerta de una vivienda en la que se iba a producir un desahucio.

El alcalde ha apuntado que "precisamente" por poner el foco mediático "en la madre del problema" un hombre ofreció una casa en alquiler a la familia desahuciada. Un solución que no es "el horizonte" pero que ofrece "una alternativa" rápida.

González justifica su presencia en el desahucio porque "uno no puede quedarse en un despacho" cuando ha vivido "de cerca" el "drama" de un desahucio y "mira a los ojos" a los afectados.

Frente a las críticas por la ineficacia de haberse personado en este desahucio el pasado lunes, Kichi responde que tampoco faltó el "trabajo de despacho", de contactar con el juzgado para pedir una moratoria y con los abogados de la propietaria para ofrecerles algunas posibilidades. "Este Ayuntamiento es de todos, va a ayudar a familias inquilinas que desahucian y va a intentar solucionar la situación de los propietarios" porque "es un problema que afecta a todo el mundo".

El alcalde ha señalado que el proceso de diálogo con Ganar Cádiz "sigue abierto" y que espera que al final sus dos ediles se integren en el equipo de gobierno "porque necesitamos de su talento y de su fuerza".

Ha indicado que una de sus próximas prioridades será "diseñar la arquitectura de un plan de empleo para esta ciudad" y que de momento para este nuevo equipo es "una cuestión secundaria" otros asuntos como tomar medidas con respecto a las zonas azules de aparcamiento o modificar el PGOU de Cádiz"

"No renunciamos en ningún momento a modificarlo, pero no lo vamos a hacer los primeros cien días", ha añadido.