La cofradía de Columna parece haber cogido la velocidad de crucero en cuanto al apartado patrimonial se refiere. En los últimos años se han producido importante estrenos en esta corporación; y para el Martes Santo de 2017 no va a ser menos. La hermandad está ultimando varias novedades importantes que se verán en la calle durante su discurrir.

En primer lugar, seguirá avanzando el dorado del paso de misterio. Después de las notables mejoras que se realizaron en la talla de canasto y respiraderos, el dorado del paso seguirá adelante este año con la mitad delantera del canasto; es decir, los dos paños delanteros de cada lateral, que se sumarán al frontal y a la trasera del canasto, ya dorada años anteriores. La doradora de Sanlúcar de Barrameda Felisa García es la que está ejecutando estos trabajos.

Y si en el paso de misterio avanza el dorado, en el palio lo hace el bordado. En este caso, se anuncia el estreno de la cara interior de la bambalina delantera, que ha ejecutado el gaditano Jaime Zaragoza, sumándose así al estreno del interior de la bambalina trasera que ya saliera en la procesión extraordinaria de Lágrimas el pasado septiembre.

Otro estreno destacado de la corporación de San Antonio serán las nuevas túnicas, cien en total, que se han confeccionado para el cortejo y que vestirán los hermanos que precedan al paso del Señor de Columna. La bordadora gaditana Rosa Reyna es la encargada de la confección de estos nuevos hábitos.

2018

Pero si notables son los estrenos de este próximo Martes Santo, llama la atención los planes que la hermandad ya tiene para el próximo año.

Así, para el paso de misterio se anuncia la terminación completa del canasto, para lo que falta el dorado de los dos paños traseros laterales y la talla de las dos cartelas centrales, que no han dado tiempo para este año. Para el paso de palio, por su parte, se anuncia también la intención de seguir trabajando en el bordado del interior de las bambalinas (el exterior ya está completamente bordado), con la posibilidad incluso de que el próximo año salieran a la calle terminadas las dos bambalinas laterales, faltando entonces el techo de palio.

Y en el caso del cortejo, para el próximo año 2018 se van a sustituir los actuales fajines de color morado que ciñen la túnica a la cintura por los característicos fajines anchos de esparto, recuperando así este elemento que antiguamente ya formaba parte del hábito penitencial de la cofradía y que mejora estéticamente el hábito de cola. También para el próximo año se quieren modificar las túnicas que recientemente se confeccionaron para los tramos de la Virgen y que necesitan una ampliación en la cola que ya ha diseñado Rosa Reyna.

"Afortunadamente tenemos un grupo de hermanos que está colaborando económicamente de manera muy importante con la hermandad, lo que unido al gran trabajo que están realizando otros hermanos está permitiendo dar todos estos pasos", destaca orgulloso el hermano mayor de la corporación, Sergio Rodríguez.