El escenario que ha rodeado a la polémica en relación a la empresa municipal Onda Cádiz ha dejado, entre otras cosas, un cruce de acusaciones sobre pactos ocultos y acuerdos bajo cuerda entre los distintos grupos políticos. Y es que tanto la sorprendente decisión del equipo de gobierno de eliminar de la parrilla de la radio un programa tras su primera emisión (a la que acudió como invitada la socialista Marta Meléndez) como la abstención de los populares ante la propuesta de cese del consejero delegado en el consejo de administración del miércoles han levantado las sospechas de la oposición.

Ya en la noche del miércoles, las representantes del PSOE y de Ciudadanos en el consejo de administración (María José Rodríguez y María Fernández-Trujillo, respectivamente) apuntaban a un posible pacto entre Podemos y el Partido Popular en relación a Onda Cádiz. La edil socialista insistía ayer en esto. "Desde que comenzara la legislatura, las abstenciones del PP permiten que salgan adelante todas las propuestas de Podemos en Onda Cádiz. Ayer, el voto del PP permitió que David Navarro continuara como consejero delegado, a pesar de que el representante popular (Vicente Sánchez) denunció gestión opaca, falta de transparencia y desinformación", denunciaba María José Rodríguez, que lamentaba que la dureza que los populares "lanzan en el resto de los asuntos, choca frontalmente con la buena sintonía que mantienen en lo que a la televisión local se refiere".

En la misma línea se manifestó Fernández-Trujillo, que se preguntaba ayer "qué tipo de acuerdo puede haber por ahí para que en todas las propuestas hagan piña Podemos y PP".

Y si estos dos partidos tienen serias dudas sobre un posible acuerdo entre populares y podemitas, éstos primeros también levantaron ayer sospechas sobre otro tipo de acuerdo, en este caso entre Podemos y la formación socialista. "Lo que ha pasado en Onda Cádiz es que el comisario político del Ayuntamiento, que es de Madrid, no tenía ni idea de que Luciano (Albarrán, el responsable del programa que fue fulminado tras su primera emisión) era enemigo íntimo de Fran González. Y cuando el PSOE ha amenazado con quitarles la tele, y no sé con qué más cosas habrá amenazado, le han quitado el programa a este señor", expuso Romaní, justificando así la abstención de su partido, "que no va a servir de muletilla al PSOE para sus cambios de cromos con Podemos".

Precisamente, sobre ese programa concretó ayer el PSOE que su enfado se basa en la invitación "a una persona (Luciano Albarrán) que está condenada por atentar contra la dignidad del portavoz socialista en el Ayuntamiento, una persona que centra su primer programa en el PSOE, incluyendo opiniones negativas en su totalidad", según expuso María José Rodríguez.

Al margen de esto, también afeó el PP que la presidenta de Ciudadanos elogiara la labor que se estaba realizando en la televisión municipal "quince días antes", durante la gala en la que Onda Cádiz celebró su décimo aniversario. "¿Hace quince días dijo que el trabajo se hacía con independencia y pluralidad -dijo Romaní mostrando además el vídeo de la intervención de María Fernández-Trujillo en esa gala- y ayer (por el miércoles) que faltaba pluralismo y transparencia? La portavoz de Ciudadanos carece de toda credibilidad", afirmó.