El fantasma de un nuevo "desierto" en la convocatoria del actual concurso para la gestión y explotación de la nueva terminal de contenedores del puerto de la Bahía de Cádiz parece alejarse después de que ayer, fuentes de la firma Concasa, admitieran su firme propósito de presentar un sólido proyecto para hacerse con el nuevo muelle de carga.

Si este periódico ya avanzó en febrero de este año el firme propósito de la actual concesionaria de la actual terminal de contenedores ubicada en el Muelle Reina Sofía de la capital, el anuncio de la prometedora adquisición por su parte de una grúa Post-Panamax ya dejaba entrever la confirmación de las aspiraciones de Concasa con Cádiz y con su puerto.

Fuentes de la Autoridad Portuaria confirmaron ayer por la mañana que aún no existía ninguna propuesta formal, pero todo hace presagiar que antes del 22 de noviembre, fecha en la que expiran los plazos para la entrega de proyectos, Concasa presentará ante la Autoridad Portuaria de la Bahía de Cádiz (APBC) un proyecto de futuro que significará, sin duda, una inyección de moral extensible a toda la comunidad portuaria.

Han sido años plagados de incertidumbres y de vaivenes con su momento más "trágico" cuando la Unión Europea duda sobre la viabilidad del proyecto y sobre su aportación económica al mismo. Su "gatillazo" provocó un efecto dominó tal que el Banco Europeo de Inversiones (BEI), que tenía que prestarle a muy bajo interés el resto del dinero que necesitaba Cádiz para su nueva terminal también, reculara.

La APBC se quedaba con una explanada cargada de deudas y bajo la sombra de la duda sobre su viabilidad.

La buena gestión y la capacidad de reacción por parte tanto del anterior presidente y del anterior director de la APBC, Rafael Barra y Albino Pardo, respectivamente, como de sus sucesores, José Luis Blanco y Agustín Romero, hicieron posible finalmente que la UE ratificara su apoyo, en todos los aspectos, al nuevo proyecto de la futura terminal de contenedores.

Una vez superado este gigantesco obstáculo ahora tocaba "venderle" la terminal a un terminalista. Para ello se licitó un concurso en diciembre de 2015 que quedó desierto en junio de 2016, sin que ninguna empresa especializada en contenedores formalizara la presentación de ningún proyecto. Esto obligó a la Autoridad Portuaria a rebajar sus exigencias para así poder lograr un novio para esta nueva terminal de carga. Se rebajó el espacio mínimos concesionable, se planteó una rebaja de tasas así como el plazo de la concesión, que ahora se establece en 10 años frente a los 35 planteados en un primer momento, entre otras muchas flexibilidades mostradas por parte del organismo dependiente de Puertos del Estado.

Con esta transigente postura mostrada por parte de la APBC, ahora Concasa es la que ha querido confirmar su intención de presentar un proyecto que confirme definitivamente su compromiso con Cádiz, con un plan de futuro que convierta esta explanada de 22 hectáreas ganadas al mar mediante rellenos en todo un proyecto industrial.

Ayer lo confirmaban de fuentes de Concasa pero el viernes pasado lo dejaban caer al anunciar la llegada a Cádiz de una grúa del tipo Post-Panamax, que ha adquirido para la terminal de contenedores del puerto de Cádiz. Así confirmaron que se convertirá en la mayor de las cuatro grúas con las que va a contar la terminal de carga ubicada en el Muelle Reina Sofía. Sus altas prestaciones aportarán al puerto gaditano una mayor capacidad operativa, tanto en capacidad como en velocidad a la hora de manejar los containers.

Concasa disfruta a día de hoy de una ampliación hasta 2023 de la concesión de la terminal ubicada en el muelle Reina Sofía de Cádiz. Esta ampliación se negoció en 2015 con la APBC en un momento en el que Concasa tenía que resetear sus cuentas. En ese momento padeció la marcha de la naviera OPDR, lo que le significó un descuadre económico que le hizo plantearse, incluso, su permanencia en Cádiz.

La fidelidad de la compañía MSC, una negociación con el puerto de Cádiz que terminó con una reducción del suelo de la terminal, con la consiguiente disminución del canon anual, y una ampliación de la concesión hasta 2023 le dio fuerza a Concasa, algo que ahora se ve reflejado en la presentación de aquí al 22 de noviembre de un proyecto formal para la nueva terminal de contenedores.