Muchos de los miembros que componen la junta de gobierno de la nueva hermandad gaditana, erigida hace unos meses, han participado durante la pasada semana en los actos conmemorativos de la coronación canónica de María Auxiliadora. Entre ellos la procesión de regreso de la Virgen desde la Catedral hasta su sede canónica, el colegio de Salesianos en Extramuros.

Esta salida procesional sirvió de mucho a los hermanos del Despojado (la nueva hermandad salesiana), pero tampoco pasó desapercibido a los cofrades en general. Sobre todo en un aspecto fundamental: el tiempo empleado por el cortejo para completar el largo recorrido.

A las cinco de la tarde inició el camino desde la Catedral la procesión, entrando el paso de la Virgen en Salesianos cuando quedaban quince minutos para la una de la madrugada, llevando en todo momento un ritmo ágil tanto el cortejo como la cuadrilla de cargadores. Es decir, que el regreso duró casi ocho horas. No obstante, hay que contabilizar las paradas del cortejo en Santo Domingo para visitar a la Virgen del Rosario (en la que se emplearon unos veinte minutos) y en la parroquia de San José, cuyo desvío de la procesión y posterior recuperación pudo retrasar la entrada en aproximadamente otros veinte minutos. Por tanto, si se obvian estas dos paradas, el recorrido se quedaría en unas siete horas.

Quiere decir que si se emplean siete horas de Catedral a Salesianos, es de esperar que se necesite prácticamente el mismo tiempo para realizar el recorrido inverso (de Salesianos a Catedral).

La suma asciende ya a catorce horas de procesión, que tendría que soportar la hermandad de Salesianos el año en que decida realizar su primera estación de penitencia (que no se descarta que sea en 2009). Pero aún habrá que sumarle las horas que se empleen en la carrera oficial y en el posterior recorrido hasta San Juan de Dios.

Tomando como modelo al cortejo de la Sagrada Cena (un centenar de penitentes y un solo paso de misterio, que es como empezará a salir la cofradía), los horarios reflejan que se emplea cuatro horas en recorrer desde Catedral hasta la calle Ancha y posterior bajada a San Juan de Dios.

En definitiva, que la hermandad del Despojado necesitará nada menos que dieciocho horas para completar su recorrido, al tener establecida su sede canónica en la lejana iglesia, respecto a la Catedral, del colegio san Ignacio-Salesianos. Atendiendo estos pronósticos calculados por Diario de Cádiz, y estableciendo el día de salida para el Martes Santo (como en principio baraja la junta de gobierno), la cofradía del Despojado debería salir de Salesianos alrededor de las once de la mañana, para entrar en la Catedral a las seis de la tarde (a las seis y media entró este año la primera en Catedral, Piedad, por lo que es de suponer que la última incorporación debe entrar primera en carrera oficial). La recogida, por tanto, sería sobre las cinco de la ya madrugada del Miércoles Santo. Un tiempo que a todas luces parece demasiado excesivo.

¿Cuáles, entonces, pueden ser las soluciones?

En principio, las vías de escape se reducen principalmente a dos. La primera sería la sustitución de los cargadores por costaleros debajo del paso, una medida que permiten los estatutos de la cofradía, que contemplan esta posibilidad más que previsible para el futuro. La segunda vía pasaría por que la salida procesional se realizara desde otro templo más cercano a la Catedral. Otras soluciones estarían en hacer parte del recorrido sin música, lo cual no acortaría excesivamente el horario.

El hermano mayor, Luis Manuel Rivero, reconoce que son "muchas horas" las que necesita la hermandad, y asegura que se está trabajando y pensando en este asunto, aunque ha preferido no hacer declaraciones "porque quiero que sean los hermanos los primeros en conocer la situación y quienes tomen la solución que sea oportuna".