El municipio de San Roque sufrió ayer un grave incendio que arrasó parte de una de sus joyas ecológicas: las fincas de Guadalquitón y Borondo. Se trata del segundo fuego importante de este verano en el municipio, tras el de la Sierra del Arca, del pasado mes de julio. Además, a pocos kilómetros, en la urbanización Punta Chullera, en Manilva (Málaga) se declaró otro minutos antes, sobre las 17:00 horas.

El de Guadalquitón, dentro de la urbanización de Sotogrande, se inició aproximadamente a las 17:30 horas, cuando un gran número de llamadas de particulares -190-, alertaron al servicio de Emergencias 112. Rápidamente, se pusieron en marcha los efectivos del Infoca, Bomberos del Consorcio Provincial de los parques de la Alcaidesa, Guadarcorte y Algeciras, así como Guardia Civil y Policía Local de San Roque. También acudieron los voluntarios de Verdemar-Ecologista en Acción.

A pesar de la gravedad del fuego, no fue necesario evacuar ninguna vivienda de la zona y fue estabilizado en torno a las 22:00 horas. El de Manilva, de menor gravedad, se controló alrededor de las 21:15 horas.

El incendio de San Roque se propagó rápidamente en dos focos durante la tarde, tras arreciar fuerte el viento de poniente. Así, una gran columna de humo se apreció en toda la comarca, mientras numerosos bañistas de las playas de la Alcaidesa y Sotogrande observaron el fuego a pocos metros y a los hidroaviones hacer acopio de agua en la misma playa.

El primer foco se inició junto a la autovía A-7, donde se emplearon los primeros efectivos que llegaron a la zona. Las urbanizaciones cercanas tenían prioridad en esos momentos, en los que se propagó un segundo flanco por el lado izquierdo, que fue mucho más difícil de controlar debido al fuerte viento. Este foco fue el que calcinó, según estimaciones de Verdemar, un centenar de la zona protegida, con un gran número de alcornoques, chaparros y otras especies, si bien desde el Infoca no se dio ayer ninguna estimación, a la espera de realizar las oportunas mediciones sobre el terreno. El fuego se dirigió a la zona de la playa cuando fue estabilizado.

Alrededor de las 21:10 horas se retiraron los medios aéreos en ambos incendios. En el caso de San Roque, participaron un total de siete, dos hidroaviones, cinco helicópteros, además el Infoca desplegó una unidad médica, cinco grupos de especialistas, cuatro autobombas, una unidad de Movilidad Meteorológica y de transmisiones, así como agentes y técnicos, en torno a un centenar. Asímismo, se estableció un puesto en mando en la Alcaidesa junto al Club de Golf, al que acudieron el delegado territorial de Medio Ambiente, Federico Fernández; el alcalde de San Roque, Juan Carlos Ruiz Boix; el subdelegado del Gobierno de la Junta en la comarca, Ángel Gavino, y varios ediles de San Roque, entre ellos, la concejal de Seguridad Ciudadana, Mercedes Serrano, que permaneció en la zona desde el inicio del fuego.

Desde el Ayuntamiento de San Roque se lamentó este incendio, especialmente porque se trata de uno de los enclaves naturales más importantes de la comarca. "Todo apunta a que ambos incendios son intencionados por lo que han sido los mismos actores". Ruiz Boix confió en que "se detengan pronto a los desaprensivos que han atentado contra esta joya ecológica en vías de incluirse en la ampliación del Parque Natural de Los Alcornocales". Además, recordó que es la última zona virgen del Mediterráneo cuyos alcornoques llegan casi hasta la misma playa.