Que la Asociación para la Difusión e Investigación del Patrimonio Cultural de la provincia de Cádiz (Adip) se haya lanzado a recabar el apoyo ciudadano para instar a la Junta de Andalucía a abrir, de una vez por todas, el Teatro Romano de Cádiz no ha sido fruto de una decisión repentina. Desde el pasado verano, los miembros de la entidad han insistido y alertado a las autoridades sobre la situación de dejadez de una de las joyas del patrimonio gaditano pero se les ha contestado con plazos que se han ido incumpliendo uno tras otro. Por eso, tal y como relata su presidente, Moisés Camacho, Adip insertó el pasado jueves su petición en la plataforma Change.org donde cualquier ciudadano podrá sumarse a la reivindicación.

"El primer movimiento que hicimos se produjo entre los meses de julio y agosto pasado con la concejalía de Cultura del Ayuntamiento. Ahí, Alejandro Varela nos informó que la delegada de Cultura, Cristina Saucedo, le había confirmado que el Teatro Romano se abriría en noviembre de 2014. Esperamos, seguimos las noticias sobre el Centro de Interpretación pero se decía nada del Teatro en sí, mientras, las columnas salomónicas de la portada de la Catedral Vieja seguían allí tiradas, y aún siguen. Después, a través de delegada, se nos dijo que abriría en marzo de este año. Y, tampoco, no vemos evolución ninguna", relata Camacho sobre la decisión de emprender esta solicitud dirigida a la delegación de Cultura de la Junta que ya ha conseguido 320 firmas.

"Ni siquiera pedimos que se abra todo, si se está trabajando en excavaciones, que por lo que yo veo no es así, se puede acotar esa parte y abrir al público el resto, como se hacía antes. A mí, y ya te hablo a nivel personal, es que me da vergüenza que los gaditanos y los turistas tengan que ver el Teatro desde una esquina", se queja.

Y es que, tal como asegura, Camacho, el Teatro Romano podría ser también "un elemento dinamizador del turismo en el Barrio del Pópulo" y "un referente" para el turismo cultural y para "nuestro patrimonio".

El Teatro Romano de Cádiz, el más antiguo de la Península Ibérica y el segundo más antiguo de Europa, lleva cerrado al público cinco años. Un lustro también lleva Cádiz a la espera de la inauguración del Centro de Interpretación de este mismo Teatro.