Una granadina estará al frente del deporte español. Ni más ni menos que María José Rienda, esquiadora de éxito con cinco Juegos Olímpicos a sus espaldas y actual directora general de Actividades y Promoción de la Junta de Andalucía, que a partir de hoy se convertirá en la primera mujer que ostenta el cargo de presidenta del Consejo Superior de Deportes (CSD), con rango de secretaria de Estado. Rienda pasará así a formar parte de la 'cartera' más movida del flamante Gobierno de Pedro Sánchez, la de Cultura y Deportes, que ya ha conocido dos ministros en muy poco tiempo y que estaba a expensas de cerrar este último nombramiento que se ha dilatado más que el de otras secretarias de Estado. De esta manera, la esquiadora española con más victorias en la Copa del Mundo -un total de seis- se enfrentará al reto de ser la persona fuerte del deporte en el Ejecutivo socialista, toda vez que el ministro José Guirao se adapta más al perfil de gestor cultural sin vínculo con el deporte que se le conozca. Aunque, eso sí, el que ha sido secretario de la Fundación Lorca está exento de polémicas como las de su antecesor Màxim Huerta, quien desde el primer momento se convirtió en el blanco de las críticas por unos controvertidos tuits en los que manifestaba su fobia a la actividad deportiva.

Rienda ocupará un cuyos último inquilinos han sido los populares José Ramón Lete y Miguel Cardenal. Los dos más recientes de un 'banquillo', el del Consejo Superior de Deportes, que ha conocido ya a 13 presidentes desde su creación en 1977 y que ahora dirigirá por primera vez una mujer que, además, combina la doble faceta de haber sido una deportiva con una trayectoria importante y que desde su retirada había entrado con fuerza en los 'despachos' de la gestión y de la política. En concreto, Rienda fue designada en 2015 la directora general de Actividades y Promoción del Deporte de la Junta de Andalucía, un cargo bajo el que se han celebrado eventos internacionales en Granada como la Universiada o el Mundial de Freestyle y Snowboard. Asimismo, durante este periplo se había convertido en uno de los pilares de la Consejería de Turismo y Deporte, acompañando a Francisco Javier Fernández en los principales eventos del ramo e, incluso, haciendo las veces del consejero en actos deportivos a los que Fernández no podía asistir y delegaba en la esquiadora granadina.

La cúpula del deporte nacional tendrá acento granadino entre Rubiales y la presidenta del CSD

Retirada en 2011 de las pistas de esquí, Rienda decidió seguir ligada a la imagen de Sierra Nevada, tan decisiva durante su carrera deportiva, y apostar por el ámbito de la gestión con la acreditación de su máster en Dirección de Entidades e Instalaciones Deportivas por la Universidad de Granada además de su titulación técnica en esquí alpino. Así, con uno de los grandes palmarés de los deportes blancos en España y su formación es como Rienda dejó los bastones para responsabilizarse del programa deportivo de la estación de Sierra Nevada.

Eso en lo referente a la gestión, ya que si por algo es conocida Rienda es por sus éxitos en el esquí alpino. La granadina, además de ser una habitual en la Copa del Mundo, disputó cinco Juegos Olímpicos de Invierno: Lillehammer 1994, Nagano 1998, Salt Lake City 2002, Turín 2006 y Vancouver 2010. En los Juegos de 2002 fue sexta en la prueba de gigante, su gran especialidad, y en 2006 cuando partía como una de las grandes favoritas para subirse al podio, no tuvo su día y perdió opción de conquistar una medalla olímpica en la estación italiana de Sestriere. Después, una grave lesión de rodilla en Aspen en 2008 le cortó su trayectoria deportiva y finalmente abandonó el deporte de élite en 2011 después de un largo proceso de rehabilitación. En ese mismo año recibió también la Medalla de Oro de la Real Orden del Mérito Deportivo.

Un currículum que le reportó una imagen muy mediática entre los aficionados al esquí en España y entre los granadinos, siendo sin duda una de las grandes figuras deportivas de todos los tiempos en la provincia al ser nombrada por muchos expertos como la mejor esquiadora española de la historia. Ahora, le tocará 'deslizarse' a Madrid para asumir la presidencia del CSD en un puesto para el que Sánchez había barajado grandes nombres del deporte patrio como el de Vicente del Bosque o el de Pepu Hernández.