El plan de seguridad de Alrumbo, que se celebrará en Chiclana entre los próximos 12 y 15 de julio, contará con más de 450 guardias civiles. En pasadas ediciones, el festival llegó a concentrar a más de 150.000 personas.

El dispositivo de protección de Alrumbo fue analizado ayer en una reunión extraordinaria de la Junta Local de Seguridad, en el Ayuntamiento de Chiclana. La presidieron el alcalde de esa localidad, José María Román, y el subdelegado del Gobierno en Cádiz, Agustín Muñoz.

No se puede impedir el acceso a las playas pero serán reforzadas la vigilancia y la limpieza"

El festival se celebrará en terrenos próximos a la Loma del Puerco, en el Novo Sancti Petri. La seguridad privada y la Policía Local chiclanera se coordinarán con la Guardia Civil. Esta es la primera edición tras la vuelta del festival a Chiclana, después de haberse celebrado los últimos años en terrenos de Costa Ballena, entre Chipiona y Rota.

En la Junta Local de Seguridad se ha hecho hincapié en que se extremen las medidas de control para que los asistentes al festival cuenten con todas las garantías de protección y, a la vez, que la masiva afluencia cause las mínimas molestias a los vecinos del municipio.

Varias mesas técnicas irán concretando a partir de ahora todos los aspectos relativos a la seguridad en este evento, en el que van a coordinarse la Guardia Civil con los agentes de Policía Local de Chiclana. Además, la empresa que organiza el festival ha mostrado su disposición a corregir las incidencias detectadas por la Policía Local y los Bomberos respecto al Plan de Autoprotección que han aportado y a otros aspectos técnicos.

Agustín Muñoz destacó que es muy importante "compatibilizar" la celebración de un evento de esta naturaleza con la seguridad de todo su entorno y con el descanso de los vecinos. De ahí, la coordinación conjunta que se viene realizando, señaló.

El cuidado de las playas también fue uno de los aspectos abordados en la reunión. La acumulación de basuras, al igual que las fiestas y botellones y las acampadas ilegales también serán objeto de especial atención para esta edición de Alrumbo. Dada la cercanía del lugar de celebración al término municipal de Conil, se ha analizado la necesidad de coordinar con ese ayuntamiento la limpieza de playa que pudiera verse afectada.

Muñoz anunció que intentarán que los accesos a la playa sean más ordenados. "No se puede impedir el paso", explicó, "al ser públicas las playas, pero será reforzada la vigilancia por parte de la Guardia Civil y la Policía Local, así como la limpieza por parte del Ayuntamiento, para lograr que esa afluencia se produzca sin incidencia en el entorno natural. También deben colaborar los asistentes, ya que conservar el medio ambiente no sólo es cuestión de las instituciones".