Continúa la cascada de reacciones ante la situación de la seguridad ciudadana en el Campo de Gibraltar y la multitudinaria concentración del jueves en Algeciras. El vicepresidente de la Junta, Manuel Jiménez Barrios, insistió ayer en que "es necesario restaurar la autoridad en el Campo de Gibraltar". Tras asegurar la lealtad de la Junta con el Gobierno, el número dos del Ejecutivo regional enfatizó que también es necesaria "una mayor presencia y dotación" de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.

Jiménez Barrios incidió en el apoyo a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y manifestó que "la democracia siempre vence a la delincuencia, pero es necesario el esfuerzo de todos".

El presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, pidió "no minimizar" lo que sucede en la comarca y reclamó cooperación de la Junta de Andalucía, el Gobierno y los grupos parlamentarios para que Algeciras "no se convierta en una ciudad sin ley donde los narcos puedan marcar la vida de diaria de tanta gente".

Desde el ámbito sindical, Eurocop, la organización de sindicatos policiales europeos que representa a medio millón de agentes, reclama que se endurezca el castigo por las agresiones a los miembros de las fuerzas de seguridad. "Sale más caro una multa de tráfico que pegar a un policía", según su presidenta, Angels Bosch. El secretario comarcal de la Confederación Española de Policías (CEP), Juan Antonio Almagro, reclamó una vez más 150 agentes para reforzar la comarca y acusó al ministro de Interior, Juan Ignacio Zoido, de no frenar la escalada del narcotráfico.

El comisario de Algeciras, Luis Esteban, achacó el incremento de la violencia a los vuelcos (robo de droga entre grupos) y al éxito de las fuerzas de seguridad que han hecho entrar a las redes en "números rojos".