La Navidad está a la vuelta de la esquina y los primeros dulces típicos de esta festividad ya se asoman en las tiendas. Los polvorones, mantecados, alfajores o turrones, son algunos de los preferidos que no pueden faltar en la mesa. Y para hablar de estos dulces navideños tenemos que dirigirnos a Medina Sidonia, que se ha ganado la fama con su exquisita repostería. Además de la buena fama de estos dulces navideños, la localidad asidonense está de enhorabuena ya que un obrador de una pastelería de Medina Sidonia ha conseguido elaborar el alfajor más grande de su historia. Y todo ello por una buena causa. 

La artífice ha sido una de sus míticas confiterías, Sobrina de las Trejas, siendo Fermín Mesa el maestro pastelero que le ha dado forma a este gigantesco alfajor que pesa 25 kilos. Además, lo ha hecho en el obrador de esta histórica empresa familiar, que ya cuenta con cinco generaciones, en colaboración con la peña cadista 'El alfajor amarillo', promotora de la iniciativa. El reto de la elaboración de este dulce navideño es recaudar fondos para las asociaciones de Medina Sidonia, que lo repartirán el 18 de noviembre y del que se pretende vender 25.000 raciones.

Con esta elaboración nos encontramos ante el mayor alfajor que jamás se ha elaborado en un obrador de Medina Sidonia, por la dificultad que conlleva esta preparación. La peña cadista 'El alfajor amarillo' repartirá lo recaudado el próximo 18 de noviembre en la plaza de abastos de la localidad a las diferentes asociaciones. Estas son Conecta Autismo, Asociación Asidonense contra el Cáncer, Conecta con el Autismo, Adijanda y la Asociación contra la ELA o el joven Iván Castro. En cuanto al maestro pastelero, cabe resaltar que Fermín Mesa pertenece a una saga de obradores que cuenta con cinco generaciones dedicadas al alfajor de Medina. Una tarea que lleva haciendo desde niño y que hasta ahora no se había enfrentado al reto de elaborar uno tan grande. 

El alfajor de Medina Sidonia

Este dulce típico de Navidad está compuesto por almendras, avellanas, miel, canela y una mezcla de especias que le otorgan un sabor inconfundible, es un legado de la influencia árabe en la península. Pese a las predicciones del Dr. Thebussem en el siglo XIX, sobre la posible desaparición de este dulce, la realidad es que continúa siendo un emblema de la repostería asidonense. 

Más allá de sus fronteras, la fama de los alfajores de Medina ha trascendido, llegando a ser conocidos y versionados en distintas regiones de España y América Latina. Estos dulces, que varían en ingredientes y presentaciones, mantienen la esencia de lo que en su día fue un alimento esencial para viajeros y conquistadores.

La receta del alfajor, celosamente guardada y transmitida de generación en generación por los obradores locales, se ha mantenido fiel en sus fundamentos, aunque cada maestro pastelero aporta sus propios secretos y variaciones, enriqueciendo la tradición sin alejarse de su esencia. El alfajor de Medina Sidonia, con su sabor característico y su forma tradicional, sigue conquistando paladares y ahora, con su versión más grande, también corazones solidarios.