Será la primera vez que el Pleno debata una propuesta firme sobre la Memoria Histórica a instancias del propio Ayuntamiento. La anterior ocasión en que la Corporación Municipal trató una cuestión relacionada partía de la iniciativa del grupo de la oposición y se refería al último alcalde republicano de San Fernando, Cayetano Roldán. Ahora el asunto remueve las filas del alzamiento militar con el general Francisco Franco a la cabeza. Sus honores y distinciones, así como los de otros, podrían quedar no sólo en el olvido como ya estaban sino desaparecer para cumplir la Ley 52/2007. Pendiente queda, sin embargo, el cambio de nomenclatura de calles o la retirada de la estatua del general Varela.

Con esta medida, el Gobierno municipal mantiene su decisión de analizar el valor artístico de este monumento antes de optar por su retirada. Ya antes la comisión creada para estudiar los diferentes símbolos del alzamiento nacional y de la dictadura franquista había presentado una conclusión al respecto: la estatua de recuerdo de Varela fue levantada con el fin de glorificar el alzamiento. Lo contemplan así, según el informe, del grupo de trabajo dirigido por el jefe del Archivo Municipal, José Luis López Garrido, las actas de la junta pro monumento. La labor desarrollada incluía también los nombres de calles que hicieran referencia a la Guerra Civil, el Movimiento Nacional y la dictadura de Franco. Es el caso de Batalla del Ebro, Ricardo Isasi y Ricardo Olivera, para su sustitución; o de Castillo de Olite y Alcázar de Toledo, para una modificación parcial.

Retrasada la postura sobre estos temas, sí avanza, por el contrario, la retirada de los reconocimiento a figuras destacadas de la sublevación militar y la posterior dictadura. La propuesta que los concejales debatirán el próximo viernes en la sesión ordinaria, que también ha sido elaborada por el grupo de trabajo, cumple con las disposiciones de la Ley de Memoria Histórica, que entró en vigor el 26 de diciembre de 2007.

Promueve la retirada de la medalla de oro de la ciudad a Francisco Franco Bahamonde, concedida el 29 de septiembre de 1950, así como el título de Alcalde Honorario Perpetuo del 13 de noviembre de 1951. Ricardo Isasi e Ivison perderá, si se aprueba, su nombramiento como Hijo Adoptivo; como Ricardo Olivera Manzorro lo hará de Hijo Predilecto -ambos reconocimiento en plena Guerra Civil-. La propuesta de retirada incluye los títulos de Ramón Agacino Armas, Gonzalo Queipo de Llano y Sierra y C. María Rodríguez de Varcárcel y Nebreda.