El arreglo del tramo de la calle Real comprendido entre La Herrán y Capitanía se aplazará hasta el mes de abril para no interferir con la Semana Santa y con el recorrido de las hermandades de penitencia que procesionan por esta parte del centro.

La Junta de Andalucía y la empresa adjudicataria de las obras para la reparación y refuerzo del pavimento de la plataforma tranviaria confirmaron ayer este replanteamiento de los trabajos de la calle Real, que atiende a la preocupación existente en el colectivo cofrade ante lo apurado de los plazos que se manejan con vistas al Domingo de Ramos.

No había garantías de que el arreglo de las losas en esta parte de la calle Real -desde su confluencia con La Herrán y Almirante Cervera hasta el edificio de Capitanía- pudiera estar a punto para la Semana Santa ya que, de hecho, ni siquiera se ha empezado a trabajar en este tramo todavía. Así que se ha optado por evitar males mayores y aplazar su reurbanización hasta el mes de abril.

Es más, la Junta aseguró ayer que no está previsto que se abran nuevos tramos en el centro de la calle Real hasta después de la Semana Santa, aunque sí se trabajará en los extremos del trazado. El objetivo es terminar lo que ya se ha empezado, entre el Carmen y Falla -por un lado- y entre la plaza del Rey, donde ya se ha abierto una parte, y la plaza de la Iglesia y La Herrán, por otro. Y los trabajos -afirman- marchan al ritmo deseado por lo que no hay razones para temer que la Semana Santa y sus procesiones por el centro puedan verse afectadas por las obras de la calle Real.

Fuentes de la Agencia de Obra Pública afirmaron ayer que desde el primer momento se ha tenido "muy claro" que la ejecución de la obra estaba condicionada a la celebración de la Semana Santa. De hecho, su calendario y planificación ha dividido la ejecución de los trabajos en dos -antes y después de la Semana Santa- para evitar que las tradicionales salidas procesionales o la instalación de la Carrera Oficial pudieran verse perjudicadas.

El tramo que llega hasta Capitanía es el único de los que se preveían ejecutar entre enero y marzo en el que no se ha comenzado todavía a trabajar y por allí discurre el recorrido de varias hermandades que utilizan las calles Marcelo Spínola y Diego de Alvear para llegar a la calle Real: Medinaceli, Ecce-Homo,Gran Poder, Misericordia, Tres Caídas y Nazareno.

De ahí también que se haya optado por aplazar el comienzo de las obras en este punto unas semanas ya que, tras la reparación de las losas y el refuerzo del pavimento con correas de hormigón, es necesario esperar entre quince y veinte días antes de retirar las vallas para facilitar su fraguado. Y ese plazo es el que más preocupa a los cofrades. La Junta, no obstante, reiteró ayer que cumplirá su compromiso.