Los propietarios de parcelas y de viviendas de El Palmar, en Vejer, tendrán la posibilidad de abrir pequeños comercios y negocios de alojamiento y restauración en el núcleo rural, siempre que éstos se ajusten a la normativa específica de cada sector. La opción forma parte de la modificación del Plan Especial de Reforma Interior (PERI) del núcleo rural, que será aprobada antes de noviembre, según consta en el proyecto de regularización detallado ayer por representantes de la Junta de Andalucía a los colectivos vecinales de El Palmar.

El PERI en vigor sólo admite usos residenciales en las primeras 42 hectáreas de superficie en proceso de ordenación, aunque contempla tres pequeñas parcelas de uso hotelero, aún por construir. Con la modificación de la normativa, el Gobierno andaluz atiende la demanda de los vecinos que han manifestado su interés en construir pequeños apartamentos turísticos, explotaciones de carácter familiar, en sus parcelas, y también soluciona una problemática realidad: la de las decenas de negocios de temporada que operan al margen de cualquier control, aprovechando el abandono administrativo que el territorio ha sufrido durante tres décadas.

La modificación del PERI acometida por los técnicos de Obras Públicas incluye otro punto destacado en beneficio de los vecinos: la superficie de parcela mínima permitida para la segregación de parcelas pasará de 1.000 metros cuadrados a 850. El objetivo de la Administración regional es que la mayoría de los propietarios pueda acceder a la titularidad y escritura de su finca, en un territorio muy desfragmentado en el que se han acometido pro indivisos de forma masiva durante dos décadas.

Ayer, Obras Públicas informó a los vecinos del plan de ejecución de la ordenación de El Palmar, donde existen más de un millar de casa ilegales. La regularización de los primeros dos centenares, destacó, comenzará en octubre de este año y se prolongará hasta mediados de 2012. Es, al menos, el calendario trazado por la Junta, que hasta ahora ha sido incapaz de cumplir sus propios plazos por la complejidad del plan y por los altos costes que, en primeros cálculos, debían repercutirse a los vecinos.

Según la información avanzada el martes, la Administración ha encontrado varias vías para abaratar estos costes: en primer lugar, la altísima valoración catastral de 2006 de El Palmar ha sido sustituida por un informe jurídico que ha reducido más de un 60% el valor del suelo; en segundo, la Consejería de Medio Ambiente y el Ayuntamiento de Vejer se han comprometido a asumir gran parte de los 17 millones en los que está tasada la obra de urbanización y prestación de servicios básicos.

Tras estos ajustes, cada vecino de El Palmar deberá abonar en torno a 60 euros por metro de finca para legalizar la situación de su inmueble, incluyendo cargas y urbanización. Al montante, habrá que sumar unos 3.600 euros del expediente de regularización, último pago del largo proceso, informó el representante vecinal Luis Alférez.