Todo apunta a que la misma banda que ha protagonizado en los últimos meses al menos cuatro robos en explotaciones de la provincia, llevándose una treintena de reses, tuvo ayer un inesperado contratiempo en Medina que le impidió consumar un nuevo atraco de ganado.

Era en torno a las seis de la mañana de ayer cuando los cuatreros irrumpían en la finca de Quico Miajones, emplazada en la zona de Fuente Chica, en Medina, reventando la cancela con un potente gato hidráulico, que dejaron allí mismo. Entraron con un camión, montaron a varios becerros y cuando iban a emprender la huida, el vehículo quedó atascado en el terreno. Así que, ni cortos ni perezosos, emprendieron la huida, dejando el camión con cinco asustados animales en su interior.

La alarma saltó. El propietario afectado avisó de lo ocurrido, y rápidamente hasta la zona se dirigieron efectivos de la Guardia Civil.

Pronto se descubrió de dónde había salido el camión atascado, un enorme vehículo marca Skania que había sido sustraído poco antes bien cerca, en la nave de un empresario que se dedica al transporte de caracoles, situada en el polígono industrial de la localidad, a muy escasa distancia.

En la nave, los destrozos habían sido cuantiosos. Tras acceder al interior forzando la cerradura de las instalaciones, los asaltantes se apoderaron del camión, poniéndolo en marcha y dando marcha atrás dentro la nave, logrando salir echando abajo la puerta con el potente vehículo.

Fuentes de la Guardia Civil confirmaron a este diario el robo frustrado de ganado, así como la sustracción del camión con el que pensaban transportar las reses en la nave del polígono.

Las primeras investigaciones barajan que los asaltantes sean los mismos que en enero robaron un camión en Rota que abandonaron calcinado con media docena de reses abrasadas por las llamas en su interior en una carretera de Carmona. Los mismos que, dos semanas después, se apropiaron de 11 becerros en otra explotación de Rota, que llevaron hasta Carmona de nuevo en un camión también robado. Y los mismos que pocas semanas después robaron seis becerros en Chipiona, y a finales de abril, otras 13 cabezas en Vejer, en la finca de Luis Morillo. En este último caso, el vehículo empleado apareció en Conil, en El Colorado.