El barrio obrero de Vallecas, en Madrid, fue escenario de un caso de solidaridad entre pobres ante la adversidad: el Rayo Vallecano, uno de los equipos más modestos la Liga, decidió ayudar económicamente a Carmen Martínez, una anciana de 85 años recién desahuciada. "Que nos haya ayudado el club más pobre nos hace pensar que otro equipo más poderoso, como el Real Madrid, podría haber hecho algo. Pero bueno, no tenemos palabras de agradecimiento para el Rayo", expresó Luis Jiménez, hijo de Carmen.

El Rayo Vallecano, mediante su cuerpo técnico comandado por el entrenador Paco Jémez, anunció el sábado que la plantilla se haría cargo del alquiler de un nuevo piso para Carmen.

La octogenaria madrileña sufrió el desahucio de su vivienda de más de 50 años, después de haber salido como garante de su hijo ante un préstamo de unos 40.000 euros por parte de un particular.

El hijo, Luis, no pudo devolver el préstamo, por lo que la ejecución hipotecaria de la vivienda se realizó el viernes, en medio de incidentes entre la policía y agrupaciones anti-desahucios.

"Estamos devastados. Era la casa de toda la vida de mi madre y ahora, a esta edad, tiene que sufrir algo como esto. Es imposible imaginarlo hasta vivirlo en carne propia", contó el hijo.

La aparición salvadora del Rayo Vallecano permite escribir un nuevo capítulo en la historia de un club atípico, con un profundo sentido social, y de un barrio hermanado con la clase media trabajadora, que ocupa el mayor porcentaje de sus viviendas.

A lo largo de su historia, Vallecas siempre tuvo tintes revolucionarios y contraculturales. De hecho, es popular la referencia "Vallekas" para referirse a su nombre, como símbolo de transgresión.

El Rayo Vallecano, para variar, no podía ser la excepción: también posee un espíritu revolucionario y con una involucración política y de lucha social casi inexistente en el resto de los clubes de España.

De hecho, el núcleo duro de sus hinchas, conocidos como los "Bukaneros", aparecen desde hace décadas en la tribuna del estadio de su equipo con símbolos anarquistas y antifascistas.

De tal manera, no era de extrañar que en el partido de ayer disputado en Vallecas, en el que Rayo se impuso por 1-0 al Celta de Vigo, aparecieran pancartas y mensajes de apoyo a la vecina Carmen.

Mensajes como "Los desahucios de un estado enfermo, la solidaridad de un barrio obrero", "el Rayismo contra los desahucios" o "#Carmen se queda", aparecieron en diferentes pancartas desplegadas en la tribuna rojiblanca.

En el minuto 31 del encuentro, toda la afición local protagonizó una sonora ovación a la plantilla y cuerpo técnico por el gesto para con la afectada.

"No me gusta hablar mucho de eso. Es un tema que se habló en el vestuario y queda ahí dentro. Lo bueno es poder, dentro de nuestras posibilidades, ayudar a la gente y tratar de sacar esto adelante", explicó el argentino Cristian Álvarez, portero del Rayo, después del partido a Canal Plus.

La familia de Carmen comentó que el técnico del Rayo, Paco Jémez, se reunió con el nieto de la desahuciada, Luis Miguel, para reafirmar su compromiso y que ambas partes se mantendrán en contacto en los próximos días. "Nosotros nos pondremos a buscar un nuevo hogar para mi madre, siempre dentro del barrio. Una vez que lo tengamos, nos comunicaremos con el Rayo para que ellos arreglen el tema de los pagos", comentó Luis Jiménez.

Según el Banco de España, en 2013 hubo 44.745 ejecuciones de viviendas por impago de los créditos.