El pasado mes de septiembre se cumplieron cinco años desde que aparecieran los importantes restos arqueológicos fenicios en el cerro de El Castillo, sin que hasta el momento se haya acometido el proyecto definitivo de la puesta en valor de este relevante yacimiento.

Fue en 2006 cuando los trabajos de control arqueológico realizados antes de comenzar la construcción de una promoción de viviendas dejaron al descubierto restos de diferentes periodos de gran trascendencia para la historia de la ciudad. Las excavaciones que se pusieron en marcha a raíz de estos hallazgos pusieron sobre la mesa las ruinas de un importante asentamiento fenicio en dicha zona. Los niveles arqueológicos más superficiales de este solar correspondían al siglo VI a.C. y enlazaban con otros de época medieval, moderna y contemporánea. Por debajo, los diferentes niveles de tierra superpuestos evidenciaban la ocupación ininterrumpida del cerro desde época prehistórica.

Los trabajos de control arqueológico prosiguieron en el año 2007 en el cerro de El Castillo, con diversos sondeos que permitieron constatar la existencia de restos en otros puntos como el patio del colegio El Castillo. Asimismo, en 2008, a consecuencia de las obras de acondicionamiento del Barrio Nuevo, se comprobó cómo continuaba la fortificación fenicia bajo el asfalto de la calle Ánimas.

La última actuación se desarrolló entre los años 2009 y 2010 en la nave municipal existente junto al solar en el que apareció el yacimiento original, una intervención que completó desde el punto de vista cronológico la secuencia del poblamiento en el lugar, con la aparición de numerosos restos adscritos a los siglos VI, V y IV a.C.

A pesar de estas importantes actuaciones en la zona, y de la notable relevancia que las mismas tienen para la historia de la ciudad, nada se ha avanzado durante estos cinco años en el anunciado proyecto de puesta en valor por el que los diferentes equipos de gobierno que han pasado por la Corporación municipal han abogado.

En este sentido, cabe recordar que hace años que se está trabajando en la propuesta de declaración del yacimiento como Bien de Interés Cultural, una medida que sigue sin concretarse y con ello retrasando las actuaciones necesarias para impulsar la apertura al público y la difusión de un entorno clave para la recuperación de un destacado pilar del patrimonio local.

Sin duda, la actual coyuntura de crisis económica no ayuda a que se inviertan las cantidades necesarias en el desbloqueo de la actuación, aunque dicha situación no es óbice para que se busquen las fórmulas de financiación alternativas .

Por su parte, el actual delegado municipal de Cultura, José Manuel Lechuga, ha asegurado que es intención de su Delegación impulsar la recuperación del patrimonio de la ciudad, a través de diferentes medidas. Aunque no ha concretado la inclusión de este proyecto en alguna de las partidas de los próximos presupuestos municipales, Lechuga destaca la búsqueda de ayudas y subvenciones para impulsar diferentes actuaciones relacionadas con esta iniciativa.

El edil de Cultura anuncia que se está llevando a cabo la creación de un grupo especial dedicado al patrimonio local dentro de la Delegación, con el objetivo de potenciar las actuaciones en esta línea. Entre los fines de esta medida están la búsqueda de ayudas y subvenciones que permitan conseguir los fondos necesarios para sufragar las actuaciones pendientes.

Asimismo, uno de los proyectos que baraja dicho área municipal es la creación de un mapa patrimonial de la ciudad, con la intención de priorizar las iniciativas mas importantes dentro de este ámbito.

Por otra parte, Lechuga ha hecho hincapié en la importancia que para su Delegación tiene este ámbito, destacando que "hemos solicitado que uno de los cursos de invierno que la UCA celebra en la ciudad verse sobre el tema "Historia y Patrimonio Cultural".