1,2 millones de euros bien valen a cambio de mejorar la calidad de vida y las expectativas de cientos de personas con cáncer. Ese es el coste del equipamiento que permitirá al hospital Puerta del Mar disponer del PET-TAC, una avanzada tecnología de diagnóstico de imagen que, según anunció la consejera de Salud en funciones, en su visita al hospital isleño de San Carlos a comienzos de esta semana, dispondrá el centro hospitalario de la capital antes de final de año. Como reconoce el doctor José Paz Expósito, director de la Unidad de Gestión Clínica (UGC) de Diagnóstico por Imagen, se trata de un equipamiento que el Puerta del Mar llevaba muchos años esperando. Al no disponer de esta tecnología, cada año se derivan a los hospitales de Sevilla alrededor de 1.200 pacientes. Así, ahora se ahorrarán costes por desplazamientos, y ese volumen de pacientes será asumible por el Puerta del Mar. Además, una provincia con una población de casi 1,5 millones de habitantes merecía ya contar con un equipo de esta envergadura.

Las ventajas del PET-TAC, que mejorará a la gammacámara SPECT-TAC que el Puerta del Mar incorporó en 2011, se sustentan en la fusión de las dos técnicas. "Antes de que aparezcan las lesiones anatómicas detectadas habitualmente por el TAC (Tomografía Axial Computerizada), hay cambios físicos en el organismo, como cambios metabólicos, que detecta el PET (Tomografía por Emisión de Positrones), pero unido al TAC se localiza de manera exacta, detectando lesiones de hasta cuatro milímetros. Antes lo localizaba en un área", explica el doctor Paz. La fusión ofrece potencialmente la información conjunta de la anatomía y la función. La PET-FDG (tomografía por emisión de positrones con fluorodesoxiglucosa) se basa en la captación de la glucosa por las células tumorales tanto del tumor primario como de la metástasis. "La fusión de ambas técnicas ha permitido integrar los datos anatómicos y los funcionales, para una valoración más segura del tejido tumoral, ofreciendo importantes ventajas en la planificación del tratamiento quirúrgico y radioterápico", apunta Paz. La fusión de las imágenes permiten un registro preciso de las imágenes anatómicas y metabólicas. "La imagen en oncología se reconoce actualmente como una herramienta crucial en el manejo de los pacientes con cáncer, en el ánimo de ofrecerles un tratamiento personalizado, a la carta", añade.

El equipo contará con las cinco funciones básicas de la imagen médica en Oncología: la detección del tumor primario (cribado), la caracterización, la estadificación (si es local o tiene afectación general), la valoración de la eficacia terapéutica (seguimiento) y la detección de recurrencias (recaída). El PET-TAC propicia "la detección más precoz del cáncer, su localización, si afecta al resto del cuerpo, la adecuación del tratamiento. Una vez diagnosticado el tratamiento, ir viendo cómo se está comportando el tumor. Estos avances permiten tratamientos muy personalizados, y ahorro de costes económicos y de salud", según señala el doctor Paz.

Son muchas las ventajas de este revolucionario procedimiento para el mundo del diagnóstico y el tratamiento de la enfermedad tumoral. El PET-TAC logra detectar nuevas lesiones hasta casi en un 40 por ciento más de los casos en los que antes no había sospechas, según un informe de la Agencia de Evaluación de Tecnologías Sanitarias. Establece la presencia de metástasis, el especialista logra imágenes más fáciles de interpretar y se producen menos resultados falsos positivos y menos falsos negativos. Igualmente, ayuda a determinar la eficacia de la quimioterapia, puesto que está modificando entre un 18 y un 25 del manejo terapéutico de los enfermos. La prueba supone más comodidad para el paciente, ya que se realiza en menos tiempo. Sin con el PET se invierten entre 50 y 70 minutos, con el híbrido PET-TAC sólo se tardan 20.

Las principales aplicaciones clínicas del PET-TAC, aunque se utiliza también para enfermedades neurológicas, serán en materia oncológica para los tumores del Sistema Nervioso Central, cáncer de cabeza y cuello, cáncer de tiroides, pulmón, colorrectal, linfomas, melanoma y tumores de origen desconocido.

Aunque la fecha tope para la instalación del equipo es diciembre, el doctor Paz tiene la esperanza de poder estrenarlo en octubre. El Puerta del Mar deberá adecuar un espacio físico para adaptarlo al equipamiento. La adqusición de la máquina se sacará a concurso y se valorará la mejor oferta. Aparatos como éste son fabricados por conocidas empresas a nivel mundial como Siemens, Toshiba o Philips. El precio, 1,2 millones de euros, es insignificante en comparación a lo que va a suponer para los enfermos y para el sistema sanitario, pero se encarece porque cada dosis del radiofármaco inyectado antes de hacerse la prueba cuesta 250 euros.