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Cádiz

El Ayuntamiento justifica la tala de los olmos por su "precario estado sanitario"

  • Un informe técnico municipal señala que los seis ejemplares presentaban "podredumbres" y suponían un "riesgo potencial de peligro de caída". Agaden niega que estuvieran enfermos.

La Asociación Gaditana para la Defensa y el Estudio de la Naturaleza, Agaden, remitió ayer un nuevo escrito al Ayuntamiento de Cádiz reclamando conocer las razones que han llevado a la desaparición de seis olmos de gran porte y de unos setenta años de edad que han sido talados durante las obras de remodelación que se están desarrollando en la plaza Candelaria. En concreto, estaban plantados en el tramo que corresponde entre las calles Cardenal Zapata y Obispo Urquinaona. En el escrito, que ya ha sido enviado a las concejalías de Urbanismo, Medio Ambiente y Parques y Jardines, se exige tener acceso al informe técnico favorable a la tala de esos árboles, ya que Agaden mantiene que no ha apreciado "plagas ni enfermedades que justifiquen esta acción", y apunta que tampoco existía "una gran deformidad en el suelo" como consecuencia de la presión de las raíces.

Asimismo, los miembros de la asociación piden en el documento que no se tale ningún ejemplar más, que se planten árboles de la misma especie en Candelaria y que se depuren responsabilidades en caso de negligencia.

Desde el Consistorio niegan que haya existido algún tipo de negligencia, y para demostrarlo han facilitado a este medio el informe técnico realizado por la Delegación municipal de Parques y Jardines sobre los olmos. En el documento -reclamado por Agaden- se indica el "precario estado sanitario de conservación" de los árboles, y se asegura que no existen medidas correctoras que puedan prever su recuperación, "dado el avanzado estado de regresión en el que se encuentran, presentando podredumbres y un mermado estado sanitario que suponen un riesgo potencial de peligro de caída". Se añade también que existen "evidentes daños originados al pavimento que han dado lugar al levantamiento del mismo".

Asimismo, dicho informe recoge la "inviabilidad del trasplante debido al estado de conservación" en el que se encontraban.

Es por ello que el Ayuntamiento ha decidido sustituirlos por cuatro ejemplares de la especie Cercis siliquastrum (conocida como árbol del amor o árbol de Judas) y tres ejemplares de la especie Bauhinia variegata. El importe de los mismos asciende a 2.033 euros, y son árboles cuyas raíces no causarán daños en la solería, según se lee en el escrito.

Respecto a la denuncia efectuada por Agaden, el Consistorio se pregunta "cuál es el supuesto interés oscuro de la Delegación de Medio Ambiente de quitar árboles de Candelaria, recordando que el PGOU no permite ubicar en los parterres ni campos de golf ni urbanizaciones de lujo".

El representante de Agaden José Antonio Sánchez Martín tacha de "inadmisible" la eliminación de estos olmos, pues insiste en que no habían apreciado ningún tipo de enfermedad ni plaga en ellos. "Es un sinsentido -critica-. El problema radica en que los árboles son vistos por parte del Ayuntamiento como elementos inertes. Los cosifican como si fuera una farola, un husillo o un bordillo, y son seres vivos". En este punto, recuerda que una gran parte de los árboles que fueron plantados antes de que Teófila Martínez llegara a la Alcaldía han sido eliminados de la ciudad. Incluso destaca que ejemplares sembrados en los últimos años ya han sido talados, aportando como ejemplos los que había en la plaza San Juan de Dios.

"La lista de arboricidios es bastante larga: en la avenida de Huelva, la calle La Palma, la plaza San Juan de Dios, la cuesta de Las Calesas, la plaza de Mina, las inmediaciones de La Caleta, la barriada de La Paz, el barrio de La Laguna... En estos lugares han desaparecido la práctica totalidad o la totalidad de las especies".

Sánchez Martín recuerda al equipo de Gobierno que existen mecanismos y técnicas para extraer y transplantar los árboles sin necesidad de talarlos, "pero eso implica una mayor inversión de dinero y, sobre todo, conciencia medioambiental y voluntad política, que no existe con respecto al arbolado en esta ciudad".

Y hablando de inversión, el representante de la asociación ecologista se hace esta pregunta: "¿Qué dinero se está moviendo con la adquisición de todo ese arbolado, especialmente de palmeras washingtonianas, que se está metiendo constantemente en la ciudad?".

Por último, resalta que la entidad vecinal Cádiz Centro, que apoya a la asociación ecologista en esta causa, también ha enviado un escrito de protesta al Consistorio.

Agaden desarrollará una campaña para recabar el apoyo de ciudadanos, asociaciones vecinales y colectivos sociales y políticos con el fin de denunciar y luchar contra los arboricidios y la deforestación de la capital.

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